Prevenir la violencia de género

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Por: Paquita Armas Fonseca.
Licenciada en Psicología, Doctora en Ciencias Psicológicas, Master en Sexualidad y en Pedagogía de la Sexualidad, Profesora e Investigadora Titular, Presidenta de la Sociedad Cubana Multidisciplinaria para el Estudio de la Sexualidad (SOCUMES), Beatriz Torres Rodríguez es la Bety que una vez a la semana habla de Sexualidad y vida cotidiana desde hace 20 años, primero en CHTV y luego en el Canal Habana.

Lic. Beatriz Torres Rodríguez. Fuente: Televisión Cubana

Lic. Beatriz Torres Rodríguez. Fuente: Televisión Cubana

Esa ha sido una de sus labores como comunicadora,  ha tenido otras (las encontrará en este texto) y próximamente será la conductora de Miradas sin excusas, una revista que precederá a la esperada serie Rompiendo el silencio. “Los paneles no comentan los capítulos del serial, sino se hacen reflexiones y se buscan alternativas y puntos de inflexión para prevenir la violencia de género para dar alternativas para su afrontamiento” subraya esta carismática psicóloga:

-¿Por qué la Psicología? ¿Algún gen en la familia?

-Cuando se escoge la carrera siendo una adolescente, generalmente como en mi caso, no hay una orientación profesional efectiva, pero siempre he sido una apasionada lectora y amante del cine y me llamaba la atención las características de los personajes, cómo enfrentaban los conflictos, cómo podía haber diferentes alternativas de solución, que no solo dependían del medio en que se desarrollaban las personas, entre otros elementos y que se acercaba a los estudios, que después aprendí, eran los componentes del entramado psicológico. También, porque a partir de lo que conocía era una profesión de ayuda, en aquella época con la visión de los pacientes con trastornos psiquiátricos, que constituían y constituyen para mí un gran misterio, a pesar de los años de práctica profesional.

No existe en mi familia ningún especialista relacionado con esta ciencia.

-¿Por qué la Sexología?

-Desde que era estudiante en la Facultad de Psicología de la Universidad de la Habana, me interesé por esta asignatura y recibí cursos extracurriculares impartidos, por lo que era en ese momento el Grupo Nacional de Educación Sexual. A su vez, comencé mi práctica profesional en un Centro de Salud Mental, y comprobé como los trastornos de la salud mental, ya sean los más complejos y crónicos hasta los más agudos, tienen en su mayoría un impacto en la sexualidad y en la vida en pareja, en las diferentes edades de la vida, que lleva a presentar, desde malestares relacionados con esta área, hasta trastornos, con una gran carga de sufrimiento en la mayoría de los casos. Esto después se enriqueció al laborar en el Centro de Investigaciones Médico Quirúrgicas, donde amplíe mi diapasón al acompañamiento y tratamiento de los pacientes con enfermedades crónicas, en especial las no transmisibles, como la diabetes, la hipertensión y la enfermedad renal crónica entre otras y el impacto que producen en la sexualidad, no solo por la propia enfermedad, sino por todos los estigmas y prejuicios del propio paciente, la pareja, el equipo de profesionales  y la sociedad, en su mayoría por el desconocimiento o subvaloración en estos temas y del impacto que producen en el bienestar de las personas con independencia de la enfermedad que presente.

Desde hace diez años soy la presidenta de la Sociedad Cubana Multidisciplinaria para el Estudio de la Sexualidad (SOCUMES), una de sus múltiples líneas de investigación es precisamente la violencia de género.

En los últimos años también he participado en una consejería para mujeres en situaciones de violencia de género, donde las implicaciones son muy marcadas en su sexualidad, la autoestima y el bienestar, entre otros. O sea, para mí es un área del conocimiento de gran necesidad y sensibilidad y que, en nuestra cultura, al considerarse por la mayoría de la población como temas privados, las personas demoran mucho en pedir ayuda y en algunos casos no lo hacen.

-¿Dónde y cuándo se estrena como comunicadora?

-Comienzo en el año 2000 en la TV en CHTV, en su revista, con la sesión Sexualidad y vida cotidiana, con la periodista Dianik Flores, sesión que después continué en el Canal habana, desde su fundación hace 15 años, junto con un grupo de prestigiosos directores y conductores como Sandra, Magdiel y todo el equipo de realización, lo cual me ha permitido un crecimiento como persona y como profesional y un diálogo sistemático con los televidentes, pues mantengo un espacio dentro de la sesión de respuestas a estos, a partir de las interrogantes de los temas presentados en el espacio. Este intercambio ha sido muy enriquecedor y se han dado alternativas de ayuda u orientación a diferentes servicios en los casos que requiera. Oír, analizar y aprender de los demás compañeros que admiro y que también tienen su sección en la Revista, me ha resultado muy útil.

He participado en otros espacios de la TV, como el El triángulo de la confianza, De tarde en casa, Entre tú y yo y Pasaje a lo desconocido, entre otros programas.

Fuente: Televisión Cubana

Fuente: Televisión Cubana

Además, desde al año 2005 y durante varios años, desarrollé en el periódico Trabajadores una consulta digital sobre la sexualidad en su página de salud. La sesión se nombraba “Hablemos de sexualidad”,  la cual fue durante años una experiencia muy interesante, al recibir  diversas preguntas de personas de diferentes edades, estado civil, escolaridad, incluso de otros países, lo que me permitió una retroalimentación de los temas que con más frecuencia preocupaban a la población  sobre la sexualidad y la vida en pareja y que muchos no se atrevían a plantear, ni a sus propias parejas, ni en el espacio de una consulta, por lo que pudimos constatar la utilidad de este espacio. Quiero reconocer la colaboración de la periodista Carmen Alfonso, a cargo de esta página de salud.

He constatado la importancia de la comunicación sobre estos temas en los medios, ya que permite a un gran grupo poblacional, sensibilizarse, reflexionar y aprender. A la vez, como especialista me ha ayudado a mantenerme atenta sobre lo que más le preocupa a la población, para poder brindar alternativas de ayuda.

-¿Ha recibido algún curso de locución?

En el año 2008-2009 recibí, junto con otros especialistas a cargo de sesiones en el Canal Habana y un grupo de periodistas, un curso de locución, el cual fue de gran utilidad y un necesario aprendizaje.

-Miradas sin excusas tendrá su conducción?, ¿Qué tiempo se preparó para este trabajo?

-Fui invitada a ser la conductora o moderadora de los paneles de especialistas de la revista Miradas sin excusas, antesala de la presentación de los capítulos del serial Rompiendo el silencio. Aunque el tiempo de preparación fue breve, contamos con el trabajo de mesa necesario y profundo, tanto con su directora y guionista Elena Palacios, Altair Reyes, la jefa de producción y la asesora Karina Paz, magnificas profesionales, con las cuales desarrollamos un excelente trabajo de equipo.

Además, desde hace algunos años, he tenido un acercamiento desde la investigación con las problemáticas relacionadas con la violencia de género, fui una de las coordinadoras del Consenso de Violencia de Género, organizado en el año 2018 por la SOCUMES y en los encuentros de investigadores en violencia de género, que organiza el Centro Oscar Arnulfo Romero. Desde hace 5 años, realizamos en conjunto, un coloquio sobre esta temática. Hace 3 años formo parte del equipo de consejería para mujeres situaciones de violencia de género en esta institución. Todo lo anterior, me ha facilitado la sensibilización y profundización en estos temas.

-¿Qué temas se tocarán?

-Es una revista especializada de análisis de las diferentes expresiones de la violencia de género, que va a servir de marco a las dos temporadas de la serie Rompiendo el silencio. Narra historias de mujeres y niñas en situaciones de violencia, en sus diferentes formas de presentación, desde las más reconocidas y evidentes como la violencia física, el abuso sexual, hasta las más sutiles, pero no por ello menos graves, como son la violencia psicológica y de otros tipos. En su segunda temporada se amplia y diversifica a otras formas de violencia, como es la ejercida hacia los hombres. Hay una representación de los diferentes contextos donde se puede presentar, como es el espacio de la familia, la pareja, el ámbito escolar, laboral, entre otros.

Su primera temporada fue transmitida de manera intencional a principios de diciembre de 2016, en el marco de la Jornada por la No violencia hacia las mujeres y las niñas. Por primera vez, una teleserie nacional abordaba esta problemática de la violencia de género como eje central, lo cual continúa en su segunda temporada como hilo conductor.

Los temas de esta segunda temporada se relacionan con:

La violencia sexual hacia niñas, adolescentes y mujeres adultas en sus diferentes formas de expresión.

Las consecuencias de las violencias de género afectan a las víctimas principales (mujeres), pero también al resto de los miembros de las familias y a los propios ejecutores de estas violencias.

Una de las consecuencias de la VG es la reproducción de la violencia, en particular las mujeres en doble condición de víctimas-victimarias.
La violencia simbólica que utiliza el cuerpo de las mujeres para ejercer el control.
Violencia de género hacia los hombres homosexuales, homofobia, transfobia, paternidad y homosexualidad.
Maltrato infantil.
Violación intrafamiliar.
Violencia entre hombres.

Se presentan historias de personajes con sus conflictos, situaciones límites y las respuestas ante las mismas, con el objetivo de provocar el reconocimiento, análisis y sensibilización acerca de este fenómeno de la violencia de género.

-¿Podría comentar acerca de los especialistas?

-Los paneles estuvieron compuestos por especialistas de diferentes campos del saber, que tenían dos características en común:

Ser expertos en sus campos de conocimiento y en temas vinculados a la VG.

Están muy sensibilizados con estas problemáticas.

Tuvimos 58 comparecencias, de acuerdo a las características de los temas, hubo expertos que participaron en más de un panel en varias ocasiones. Estuvieron representados Psicólogos, Sociólogos, Juristas, Periodistas, Antropólogos, Pedagogos, Médicos, Historiadores, Realizadores, Comunicadores y Profesionales de la Fotografía, entre otros. Se logró un trabajo de equipo y lo más importante a mi juicio, es que se persiguió ilustrar a la población sobre estos temas, ver las señales de la VG, sus causas, repercusiones en la familia, la sociedad, las diferentes alternativas para afrontarla y dónde se pueden encontrar puntos de inflexión en las diferentes situaciones que se presentan, para no reproducir la violencia y lo más importante prevenirla.

-¿Alguna recomendación para los televidentes?

– No alarmarse ante estos temas, ya que lo importante es reconocer las diferentes formas de VG, y que este es un problema social de tal importancia, que detenerse en el número, o si es más o menos frecuente, no es lo esencial, pero si una sola mujer, niña o cualquier persona está en estas situaciones, merita todo nuestro esfuerzo y atención. Lo más importante es PREVENIR, para que la VG y cualquier forma de violencia no se naturalice. De aquí la voluntad política de nuestro país y sus instituciones para lograr una respuesta efectiva, integral e integrada. Esta revista es parte de este empeño, de los muchos que se necesitan.

La FMC lidera junto con otras instituciones esta estrategia, donde ya se observan señales como la línea de ayuda y el Programa de adelanto de las mujeres, entre otros.

-Lo que no le haya preguntado y desea decir

-Quisiera por último agradecer nuevamente a todo el equipo de trabajo de la revista y a la Msc. Mareleen Díaz Tenorio, con la cual mantuvimos un intercambio sistemático durante todo el proceso de rodaje, ya que fue la capaz asesora de la serie Rompiendo el silencio.

Tomado de: Televisión Cubana

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