Los trastornos por el uso de drogas constituyen un grave problema de salud a nivel mundial, con una importante carga para los individuos afectados y sus familias. Existen también costos significativos para la sociedad, que incluyen pérdida de productividad, retos de seguridad, crimen, costos crecientes de cuidado de la salud y una infinidad de consecuencias sociales negativas. Las adicciones integran complejos trastornos biológicos y conductuales con múltiples factores generadores. No se debe pasar por alto que todavía persisten opiniones obsoletas acerca los trastornos adictivos, el consumo de drogas y las personas que lo padecen, pues se asocian muchos componentes de estigma y discriminación que limitan las posibilidades de reinserción social.
Se calcula que un total de 250 millones de personas ó 1 de cada 20 con edades entre los 15 y 64 años, usó alguna droga ilícita (Informe Mundial sobre Drogas, 2019). Aproximadamente 1 de cada 10 personas que usan drogas ilícitas está padeciendo algún tipo de trastorno por el uso de drogas, incluyendo farmacodependencia. Entre las problemáticas más complejas por sus afectaciones directas a la salud y al comportamiento social, está el consumo y el tráfico de drogas. Al abordar este tema, se deben tomar en cuenta diversos aspectos tales como: el componente económico que lo rodea, pues este negocio nueve millones y está en el centro de interés del crimen organizado. Otro aspecto tiene que ver con cierta permisividad social, que minimiza los efectos adversos y el potencial adictivo de estas sustancias ilegales.
En Cuba se aborda este tema incidiendo en la eliminación del tráfico y, por tanto, de la oferta y la demanda, pero también procurando la rehabilitación de los adictos y su reinserción plena a la sociedad. Un aspecto que no se descuida es la prevención del consumo en adolescentes y jóvenes y la promoción de estilos de vida saludables y que favorezcan el autocuidado.
El mejor remedio siempre está en la prevención, para evitar caer en la cadena del uso, abuso y dependencia, de la cual puede ser difícil salir y exige toda la voluntad del individuo y la motivación necesaria en la búsqueda de factores que movilicen la necesidad de cambio. Ante esto, es bueno recordar que ante un problema de consumo de drogas se puede buscar ayuda telefónica a través de la Línea Confidencial 103.
Lic. Giovani Leal Luque