Una vida no basta para romper cadenas, una vida no basta para hacer y ser ese hombre nuevo en un mundo lleno de logros y controversias. Eso lo demostró un guerrillero que va desde la montaña al llano y viceversa. Sus ideas, carisma e impronta quedaron impregnado en la sociedad cubana. Al cumplirse el aniversario 52 de su caída en combate lo recordamos como ese ejemplo de hombre nuevo que luchó por un mundo libre de desmanes, que combatió por la liberación de muchos pueblos.
La Facultad de Ciencias Médicas Manuel Fajardo le rinde tributo a este hombre que engendro el estudio por la medicina, las ansias de salvar vidas, la solidaridad por los pueblos del mundo, el trabajo voluntario dirigido hacia los más necesitado.