Prevenir las enfermedades diarreicas agudas (EDA): pasos sencillos para proteger tu salud

Se entiende por diarrea como un aumento brusco en el número y volumen de las deposiciones o cambios en su consistencia. La OMS define como enfermedad diarreica aguda a la ocurrencia de tres o más deposiciones líquidas o blandas, en 24 horas, y con una duración menor de 14 días. Según su etiología, pueden clasificarse en no infecciosas e infecciosas. Entre las no infecciosas, las más comunes están dadas por disalimentación o transgresión alimentaria, medicamentos, alergia transitoria a la leche de vaca, agua rica en sales minerales. Entre las infecciosas, se encuentran las producidas por infecciones extraintestinales como las respiratorias y de las vías urinarias, y las infecciones intestinales por virus, bacterias, parásitos y hongos. Los agentes infecciosos generalmente se transmiten por vía fecal – oral (ano – mano – boca), que incluye la ingestión de agua contaminada (no hervida), alimentos contaminados, y contacto directo con heces.

Existen comportamientos en las personas que contribuyen a contraer diarreas y pueden ser modificables, como:

– Ausencia de lactancia materna exclusiva en los primeros 6 meses de vida.

– El uso de biberones para alimentar a los más pequeños.

– Guardar alimentos a temperatura ambiente.

– No hervir agua de consumo.

– No lavarse las manos después de manipular alimentos, las heces de los niños o personas en situación de discapacidad o de defecar.

Otros factores de riesgo presentes son la inmunosupresión; la edad (principalmente los menores de 2 años); las variaciones estacionales en nuestro país ocurren todo el año aunque las diarreas virales aumentan en períodos invernal y lluvioso y las bacterianas tienen mayor incidencia en períodos lluviosos y cálidos.

La gran mayoría de las infecciones diarreicas son asintomáticas, incluso van aumentando después de los 2 años, por el desarrollo de la inmunidad activa, lo que contribuye a la propagación silenciosa de agentes patógenos, ya que no se toman las medidas higiénicas especiales para ello.

Como manifestaciones clínicas acompañantes pueden aparecer síntomas y signos como fiebre, decaimiento, vómitos, dolor abdominal de tipo cólico y eritema perianal. Constituyen signos de alarma por los que se debe acudir inmediatamente al centro de urgencias de salud más cercano, trastornos de conciencia como somnolencia o irritabilidad, no tolerancia a la vía oral y aquellos que indiquen deshidratación como boca seca, llanto sin lágrimas, orinas escasas, decaimiento marcado, entre otros.

La enfermedad diarreica aguda es prevenible, tomar las siguientes medidas ayudará a evitarla:

– Fomentar la lactancia materna exclusiva hasta los 6 meses y complementada hasta los 2 años, educar a la madre a preparar adecuadamente las fórmulas de leche artificial, en el caso que requieran de las mismas.

– Reforzar las medidas encaminadas a lograr y mantener una correcta higiene del hogar, personal y de los alimentos, entre ellas, lavarse las manos después de ir al baño, antes de manipular alimentos, tapar bien alimentos, utensilios y biberones.

– Educar a la familia acerca de una adecuada nutrición, y la asistencia temprana a servicios de salud en caso de presentar diarreas.

– Disponer de agua potable.

– Asegurar el saneamiento y el buen funcionamiento de redes de alcantarillado.

Prevenir las EDA está en tus manos. Pequeñas acciones en casa, evitan grandes riesgos. ¡Cuida la salud de quienes más amas!

Dra. Yeisel Ramírez Arias.