Celebramos el nacimiento de nuestro Comandante en Jefe su legado se encuentra presente cada día en el día a día de nuestra isla. Siempre presente está el estratega, el previsor de los peligros futuros, con su aporte a la ciencia, por enseñarnos a librar batallas y a vencerlas, convirtiendo los reveses en victorias.
Los antecedentes del pensamiento de Fidel Castro acerca de la Salud Pública cubana se encuentran en su alegato de autodefensa La Historia me Absolverá, en el cual analiza la grave situación política y socioeconómica que vivía la nación.
En cuanto a la salud pública señala: …”El noventa por ciento de los niños del campo está devorado por parásitos… El acceso a los hospitales del Estado, siempre repletos, sólo es posible mediante la recomendación de un magnate político que le exigirá al desdichado su voto y el de toda su familia para que Cuba siga siempre igual o peor…” En dicho documento Fidel refiere además, que la mortalidad infantil era superior a 60 niños fallecidos por cada mil nacidos vivos; la esperanza de vida no rebasaba los 55 años de edad; un médico por cada mil habitantes, pero concentrados en la capital.
En la Sierra Maestra, en plena lucha de liberación nacional, en horas de descanso, cuando conversaba con sus compañeros de sus proyecciones futuras refería:
“… No hay que esperar que las enfermedades lleguen con su amenaza tétrica, hay que prevenirlas, hay que evitarlas. Desde ahora hay que ir elaborando los planes sanitarios…”
Muchos fueron sus aportes al sector de la salud en nuestro país y en mundo. Fue el creador de la concepción de Consultorio Médico de Familia. Estaba convencido de que la ciencia tenía que constituir parte de la vida cotidiana de este país y por ello, ideó y dirigió la formación de los polos científicos y de recursos humanos para garantizar los programas de salud y la elaboración de nuevos y revolucionarios contenidos que hoy avalan la labor de nuestros médicos en cualquier lugar del mundo.
Creó el Contingente Henry Reeve y advirtió su importancia ante pandemias y desastres naturales. Luego llegaron las difíciles pruebas que le daban la razón: terremotos en Paquistán, Haití y otros países, el Ébola en naciones del África sufrida, la Covid-19, letal virus que en pocos meses hizo vulnerable al mundo. Tanta ha sido la gloria que ha conquistado este Contingente que fue nominado para el Premio Nobel de la Paz 2021. Se trata de la nación que envía a sus hijos a ofrecer salud y vida a cambio de nada. No importa en ningún caso, la afiliación política o la fe religiosa del enfermo. Son seres humanos y a ellos va dirigida toda acción altruista de este gran ejército de batas blancas.
Fidel continúa entre los corazones del pueblo Latinoamericano y su legado inspira a batallar incesantemente por una Cuba libre, soberana y sostenible, para cumplir sus sueños.
¡Hasta la victoria siempre Comandante!