La Agenda 2030 y sus Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) en Cuba.

En septiembre de 2015, fue aprobada la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, durante la Cumbre de Desarrollo Sostenible celebrada en el marco del 70 periodo de sesiones de la Asamblea General de la ONU. La aprobación de este documento, con sus 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y sus 169 metas, significó el compromiso de todos los países miembros de las Naciones Unidas con la búsqueda de un nuevo paradigma de desarrollo. La Agenda 2030 es el resultado del proceso de consultas más amplio y participativo de la historia de las Naciones Unidas y representa el consenso emergente multilateral entre gobiernos y actores diversos, como la sociedad civil, el sector privado y la academia. Es un plan de acción a favor de las personas, el planeta y la prosperidad, que también tiene la intención de fortalecer la paz universal y el acceso a la justicia.  Es evidente que el desarrollo sostenible en la actualidad se enfrenta a un desequilibrio en lo que respecta a sus tres pilares principales – económico, social y ambiental.

Para Cuba la consecución de la Agenda 2030 y sus objetivos, ha constituido desde ese momento un compromiso de Estado que se concreta en la alineación de los 17 ODS con el Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social hasta 2030 (Pndes 2030).  Asimismo, la Constitución de la República de Cuba de 2019 incluye elementos que brindan soporte jurídico al cumplimiento de los ODS en el país. Por su alto grado de prioridad, en el año 2017 se decidió actualizar la conformación del Grupo Nacional para la Implementación de la Agenda 2030 (GN) en el país, el cual está bajo la dirección del Ministerio de Economía y Planificación (MEP), por Organismos de la Administración Central del Estado (OACE), entidades nacionales, parlamentarios, académicos, representantes de la sociedad civil y otros actores de la sociedad.

Los ODS posicionan la salud como una de las metas sociales de los gobiernos y como parte de los derechos económicos, sociales y culturales de las personas, por lo que requiere un alto grado de compromiso político y trabajo intersectorial para su cumplimiento. Una forma de lograrlos es mediante la promoción de la salud y la salud en todas las políticas como herramientas imprescindibles que desde el punto de vista de la salud pública se deben utilizar para dar una respuesta eficaz a los problemas de salud y ambiente y, la disminución de las inequidades sociales.

 ¨Los próximos años serán un período vital para salvar el planeta y alcanzar un desarrollo humano sostenible e inclusivo¨.