El Día Mundial sin Fumar, o Día Mundial sin Tabaco, se celebra cada año el 31 de mayo pues en esta fecha se conmemora la campaña mundial iniciada en 1987 por la ONU para reducir el consumo de tabaco y con ello las muertes ocasionadas por este mal hábito. Esta celebración es promovida por todos los países miembros de la ONU, la OMS y OPS, su propósito es concientizar a la población mundial sobre los efectos nocivos del consumo de tabaco e incentivar la implementación de políticas públicas eficaces para disminuir su consumo. Anualmente fallecen aproximadamente 6 millones de personas en el mundo a causa de enfermedades derivadas directamente del consumo de tabaco. 600 mil de esas 6 millones de personas no son consumidores directos, sino que están en contacto permanente con el humo producido por el tabaco. La mayor causa de fallecimientos es el cáncer de pulmón y cerca de un 80% del total de muertes ocasionadas por este, puede ser prevenido mediante la eliminación del consumo de tabaco.
Cuando se habla del pleno goce de la vida, lo primero que debemos tener es salud y para ello, cuanto hay que aprender y decidir. De esto, trata un poco en este año el día mundial sin fumar. Desde que somos concebidos, mucho son los factores que influyen en nuestro desarrollo, sin embargo, durante la niñez y la adolescencia, cuanto de nuestra familia, de nuestro entorno y de nuestra capacidad de aprender, interpretar y decidir nos lleva a ser más o menos saludables. Aportar conocimientos, habilidades, educar para transformar mitos, costumbres, lecciones mal aprendidas y trasmitir de una manera clara y sencilla a todos los que queremos y conocemos es una labor que en este 31 de mayo pretendemos impulsar con el objetivo de lograr futuras generaciones libres de tabaquismo. Mensajes que desde la voz de un niño o niña son capaces de sensibilizar y demostrar con una perspectiva positiva, como una vida sin fumar es posible y con muchos beneficios.
Sin fumar e inhalar el humo de tabaco que tantas sustancias toxicas y dañinas propaga en nuestro organismo y el ambiente, se podría disfrutar de una piel más fresca y más tersa, de un aliento agradable, sentirse ágil y saludable, tener más dinero para darse gustos, ser un buen ejemplo para todos, reducir el riesgo de padecer enfermedades graves y vivir más y mejor. Estos y muchos más son los beneficios que nos regala una vida sin tabaco. Con la intención de tener una mirada diferente a un problema de tal magnitud y que siempre es abordado a partir de sus consecuencias, no solo al individuo sino a la sociedad, es que hoy se desarrollan acciones con énfasis en la comunicación y la implementación de una campaña que haga reflexionar desde las bondades que tiene proteger la salud e instaurar desde edades tempranas, hábitos y costumbres que permitan que el valor más preciado que es la salud sea un propósito y se haga tangible para todos.
Vivir sin fumar, es más saludable y Esto si es vida.