Un viernes en la noche, aquel 25 de noviembre del año 2016, se estremeció el país cuando el presidente de Cuba en aquel momento, Raúl Castro, ofreció un discurso televisivo en el que informó con profundo dolor el fallecimiento de su querido hermano Fidel. Había fallecido a las 10:29 p.m, a la edad de 90 años.
La noticia impactó no solo a Cuba, también al mundo entero, dada la relevancia del Comandante en Jefe Fidel Castro en la historia. En cada victoria de Cuba en el escenario internacional ha estado la impronta de Fidel, quien con su excepcional conducción convirtió a la diplomacia cubana en una de las más activas y exitosas de todo el orbe. Para Fidel la Revolución Cubana debía ser apenas el comienzo de una revolución más profunda, la que debía ocurrir en toda América Latina y el Caribe. Sigue siendo uno de los paradigmas más importantes que legó a la humanidad en el campo de las relaciones internacionales. Fidel es recordado como uno de los estadistas mundiales más destacados de la historia.
El espíritu humanista de los médicos cubanos se extiende por el mundo. Satisfechos de cumplir con el juramento hipocrático, son reflejo de una alta preparación ética, solidaria y científica, alentada por el líder histórico de la Revolución, Fidel Castro. La acción y el pensamiento del Comandante han sido decisivos en los grandes cambios que han acontecido en el sistema nacional de salud. El programa del médico de familia, fue creado por él desde el año 1984 y marcó pautas en la salud pública cubana, pues ha favorecido el trabajo con embarazadas, adolescentes, niños y población adulta.
Este proyecto ha contribuido a elevar grandemente los indicadores sanitarios en Cuba, pues permite la atención personalizada, un diagnóstico temprano, visualizar factores de riesgo en la comunidad, promover y realizar actividades de rehabilitación física, mental y social, interconsultas con otras especialidades, atender a pacientes ingresados en el hogar y seguimiento en hospitales, entre otras tareas. Desde los primeros años de la Revolución, Fidel estimuló el espíritu internacionalista en el personal sanitario,
creó el Contingente Internacional de Médicos Especializados en Situaciones de Desastres y Graves Epidemias “Henry Reeve”’, también la Escuela Latinoamericana de Medicina, entre otros disímiles aportes a la salud y a la investigación en Cuba y el mundo.
Fidel sigue y seguirá viviendo en cada victoria del pueblo cubano, así como en ese espíritu rebelde y optimista que, a la hora de enfrentar cada obstáculo, caracteriza a nuestra gente.
Como decía nuestro José Martí, ¨La muerte no es verdad cuando se ha cumplido bien la obra de la vida¨
Fue y sigue siendo muy grande Fidel, líder, revolucionario, estratega, orador.
¡Mil hombres en uno!