Fue en 1974 cuando la Organización de las Naciones Unidas estableció el 5 de junio como el Día Mundial del Medio Ambiente. La ONU se marcó como objetivo principal en el más exitoso de sus eventos anuales la sensibilización ambiental y lograr motivar a la población a ser parte activa del desarrollo sostenible. Desde entonces se convirtió en una fecha que nos brinda la oportunidad para ensalzar el valor de la naturaleza y su importancia para la vida en el planeta. Es hora de ser más conscientes de las acciones que acometemos y cambiar hábitos para lograr su protección y cuidado.
Este año 2021 el tema se centra en la restauración de ecosistemas y la urgencia de hacer las paces con la naturaleza, esta jornada dará inicio formal al Decenio de las Naciones Unidas para la Restauración de Ecosistemas 2021-2030. Ya que estos son el sustento de la vida en La Tierra. Su cuidado y protección repercute de forma directa en la salud del planeta y sus moradores.
Pakistán será el país anfitrión de este importante día. Su elección se debe a su ambicioso proyecto con el que proyecta plantar 10.000 millones de árboles en un plazo de 5 años. Se trata de uno de los esfuerzos más ambiciosos entorno a la forestación realizado hasta la fecha. La acción incluye la restauración de manglares y bosques, así como la plantación de árboles en entornos urbanos, incluidas escuelas, universidades, parques públicos, cinturones verdes y jardines, entre otros para facilitar la transformación hacia iniciativas ambientalmente resilientes y focalizadas sobre forestación y conservación de la biodiversidad.
Este 5 de junio tenemos la oportunidad para corregir el rumbo: prevenir la catástrofe climática, detener la creciente ola de contaminación y desechos, y frenar la pérdida de biodiversidad. No podemos volver el tiempo atrás pero somos la generación que puede hacer las paces con la naturaleza.
Para ello es de destacar en nuestro país la jornada juvenil por el Día Mundial del Medio Ambiente que se nombra Juventud en verde con acciones en favor de la preservación, el saneamiento, la educación ambientales y la reforestación impulsada por las BTJ y la Red Juvenil Ambiental que acontece esta semana, con movilizaciones en los 168 municipios cubanos, por la situación, no han sido muchos los participantes de forma física, pero han sabido aprovechar la oportunidad. Cuenta con un amplio programa que va desde labores de higienización hasta otras iniciativas en aras de la preservación y el aumento del patrimonio forestal de la nación. Se le suman premiaciones de concursos, exposiciones y reconocimientos a jóvenes destacados. No han sido frenados por la actual pandemia, con las medidas pertinentes y conscientes de la urgencia de sus acciones son un ejemplo a seguir.
Tomemos estos actos como guía y cuidemos cada quien nuestro entorno, el planeta nos lo agradecerá.