Como no podía ser de otra manera, el Día Mundial de la Salud Mental de este 2020 (que se celebra cada 10 de octubre) se hace eco del extraño momento que vive la humanidad propiciado por la crisis (sanitaria y de todo tipo) de la Covid 19. La vida de millones de personas se ha visto alterada por la llegada de esta pandemia global, con las lógicas consecuencias para la estabilidad de los individuos y su equilibrio psicológico.
De forma tradicional el propósito de esta celebración es visibilizar el trastorno mental que padecen millones de personas en el mundo, por desgracia, potenciado en el contexto de la pandemia con una afectación mayor que impone nuevos retos. La Organización Mundial de la Salud busca generar iniciativas que apoyen a estas personas y les ayude a enfrentar sus problemas de salud y encontrar alternativas de afrontamiento desde el campo de la salud mental.
En este 2020 el lema elegido para presidir las celebraciones y servir de foco de atención es: “Salud Mental y bienestar, una prioridad global” haciendo referencia a la necesidad de potenciar la existencia de servicios de salud mental accesibles para todos, pues como, tristemente, ha mostrado la Covid-19, el mundo está muy lejos de eso.
Y es que hablar de salud mental, no hace referencia solo a padecer una enfermedad o no, sino a encontrarse en un estado de equilibrio que dependerá de muchos factores y de cómo estos se integren y afecten a la psique de cada persona. De esta forma, la salud mental agrupa el bienestar emocional, psicológico y social e incidirá en la forma en la pensamos, sentimos y actuamos frente a los acontecimientos de la vida. Muchas veces las personas minimizan la importancia de mantener y buscar la mejora de la salud mental o equilibrio psicológico porque el ritmo de la vida cotidiana, el estar sometido a situaciones mantenidas de estrés y considerar que puede ser manejado de forma adecuada, hacen postergar esta necesidad. A esto se suma una cierta desconfianza acerca de la efectividad de esta atención y sus recursos terapéuticos, así como la estigmatización de los que padecen alguna afectación relacionada con este campo.
Cuba no escapa a la realidad bosquejada y, a pesar de que los servicios asistenciales en este terreno existen y son accesibles en todos los niveles de atención dentro del sistema nacional de salud, no siempre son aprovechados por los que pueden necesitar de asistencia o apoyo psicológico para solucionar múltiples problemas de la vida cotidiana, que terminan por afectar su calidad de vida y la percepción individual sobre el propio bienestar.
El tratamiento dentro del campo de la salud mental consta también de un enfoque de prevención, pues se sugiere que todas las personas mantengan relaciones sociales estables y positivas, mantengan estilos de vida saludables que respeten aspectos fundamentales como el sueño, la alimentación y el ejercicio físico.
El cambio radical que ha impuesto la pandemia muchas veces ha modificado, incluso, la manera en que garantizamos nuestra estabilidad psicológica. Esta enfermedad ha tenido efectos en la salud de las personas y las maneras que tenemos de relacionarnos y sentirnos protegidos y a salvo. Las restricciones han venido a ser una costaste nueva para el mundo trayendo una nueva manera de vivir y, por supuesto, las consecuencias para la economía, lo que se ha tornado en otro tipo de pandemia global. Todos estos cambios bruscos generan que muchas personas tengan dificultades para adaptarse a ellos y necesiten buscar apoyo desde el campo de la psicología y la psiquiatría.
La respuesta siempre estará en el apoyo y la solidaridad. Es momento de unirse y compartir a través de múltiples vías de contacto que propicia la modernidad. El distanciamiento no es un llamado a la soledad, sino una invitación a entender y vivir el mundo desde una perspectiva diferente a la que todos estamos llamados a adaptarnos. En este reto puede que, a veces, necesitemos acompañamiento y ayuda especializada, para esto en Cuba se cuenta con servicios de orientación como la Línea de Apoyo psicológico (103) y los servicios de salud mental en los policlínicos y centros habilitados con este objetivo en cada municipio.
Las opciones existen, sobre todo, porque también son un campo donde hay que vencer a esta pandemia.
Biblioteca Virtual en Salud
Editorial Ciencias Médicas
