Prepararnos y organizar la dinámica laboral para reducir la posibilidad de un brote de COVID-19 en los lugares de trabajo es una actividad clave en esta emergencia de salud. En todos los centros de trabajo, con mayor énfasis en aquellos que atienden público, se deben aplicar medidas de distanciamiento social e higiénicas al llegar, durante y al terminar la jornada laboral.
Las medidas preventivas que debemos adoptar en los centros laborales comienzan por:
- Crear condiciones para el correcto lavado de las manos de todos los trabajadores con agua y jabón y/o la aplicación de solución de hipoclorito de sodio al 0,1%.
- Exigir el uso del nasobuco y su cambio cada dos o tres horas o tan pronto como esté húmedo para que esta medida sea efectiva.
- No intercambiar con otros compañeros alimentos, vasos, ropas, pañuelos o artículos de uso personal.
- No visitar a personas o compañeros enfermos.
- Utilizar solución de hipoclorito de sodio al 0,5% para la desinfección de superficies con las que usted permanece en contacto en su puesto de trabajo.
- Evitar tocarse los ojos, la nariz y la boca.
- Cubrirse la boca y la nariz con un pañuelo o el codo flexionado al toser o estornudar.
- No autorizar la entrada al centro laboral de algún trabajador con síntomas respiratorios.
Ahora que las personas se están incorporando a los centros laborales es muy importante tener en cuenta estas medidas que exponemos, evitando así, cualquier brote de COVID – 19.
Al regresar del centro de trabajo a su casa los trabajadores deberán lavarse las manos y cambiarse de ropa, cuidando así a la familia, sobre todo a los que constituyen grupos de riesgo.