La Covid-19 es una enfermedad respiratoria trasmitida de persona a persona por un tipo de coronavirus denominado SARS-COV 2, puede evolucionar desde una forma ligera con manifestaciones catarrales hacia una forma grave. La enfermedad ha tenido una amplia y rápida propagación por el mundo y una elevada mortalidad, siendo considerada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) una pandemia.
Todos estamos en riesgo de contraerla, pero sin dudas son los adultos mayores un grupo muy vulnerable a padecer la enfermedad y desarrollar formas graves por tener la capacidad inmunológica disminuida y padecer enfermedades crónicas (Diabetes Mellitus, Hipertensión Arterial, Enfermedades Cardiovasculares y Respiratorias, ser fumador, entre otras) asociadas al envejecimiento poblacional.
Cuba tiene una tasa del 20,8% de su población mayor de 60 años, más de dos millones de personas por lo que proteger al anciano que tenemos en casa es una responsabilidad de toda la familia. Garantizando sus necesidades básicas en el hogar, cumpliendo las medidas higiénicas-sanitarias definidas por el Minsap y el aislamiento social, disminuimos el riesgo que ellos enfermen.
Organicen de conjunto las tareas domésticas y que los jóvenes protejan a los abuelos, fomente la lectura, la práctica de ejercicios físicos y los juegos en familia, conversaciones, escuchar música y ver juntos la televisión con temas atractivos a los adultos mayores facilita su distracción y salud mental. Utilice la vía telefónica y las redes sociales para mantener el contacto con otros familiares y amigos.
Mantenga estilos de vida saludable, garantizando la circulación del aire al ventilar su vivienda, cumpla una alimentación balanceada incorpore el consumo de frutas y vegetales. No permita que recurra al consumo del tabaco y el alcohol.
Recuérdele evitar tocarse la boca, la nariz y los ojos, propicie el lavado de las manos con abundante agua y jabón frecuentemente y uso de soluciones desinfectantes alcohólicas o de hipoclorito de sodio al 1%. Prevenga accidentes en el hogar, guarde en un lugar seguro las soluciones desinfectantes.
Esté vigilante a su estado de salud, no existen vacunas ni tratamientos curativos específicos para la enfermedad pero si medidas preventivas que evitan su propagación. Ante cualquier síntoma o dudas, acuda rápidamente a su médico de familia.
Es un buen momento para demostrarles nuestro amor, respeto y cariño, que sea la unión familiar su mejor refugio. Tras la conducta de cada uno, está el destino de todos.