- Santana Porbén S, García García RJ, Marcos Plasencia LM, Pérez Santana MB, Cillero Romo M. Actuación alimentaria, nutricional y metabólica en la hiperamonemia observada en el curso de una encefalitis autoinmune. Rev cuban aliment nutr [Internet]. 2016 Dic [citado 14 Ene 2019];26(2):1-12. Disponible en: http://www.revalnutricion.sld.cu/index.php/rcan/article/view/75.
Resumen: En esta presentación se describen las acciones alimentarias, nutrimentales y metabólicas hechas ante un cuadro agudo de hiperamonemia desarrollado en un escolar que fue atendido en el Servicio de Neuropediatría del Hospital Pediátrico Docente “Juan Manuel Márquez” ante el diagnóstico de una encefalitis autoinmune. La presencia de convulsiones durante la evolución de la enfermedad requirió el tratamiento con Valproato de sodio [RESUMEN TRUNCADO DESPUÉS DE LAS PRIMERAS 100 PALABRAS]..
- Barreto Penié J, Barceló Acosta M, Martínez González C, Espinosa Borrás A, Núñez Velázquez M. El proceso del diagnóstico de los trastornos nutricionales del paciente hospitalizado. Acta med [Internet]. 2017 Mar [citado 21 Nov 2018];17(2):[aprox. 15 p.]. Disponible en: http://bvs.sld.cu/revistas/act/vol17_2_16/act06216.htm.
Resumen: Una mejora en la calidad total de la atención del paciente exige la organización de un sistema de detección precoz de la desnutrición para la totalidad de los pacientes ingresados. Se realiza una revisión evaluativa que intentará ofrecer herramientas concretas sobre aspectos etiológicos, patogénicos, diagnósticos y clínicos que constituyen hoy la base para el reconocimiento y tratamiento de los trastornos nutricionales asociados a las enfermedades, con el objetivo de identificar los aspectos relevantes conocidos, los desconocidos y los controvertidos sobre esta temática que hoy está requiriendo de nuevos enfoques y consensos. La evaluación del estado nutricional se considera el primer eslabón del tratamiento nutricional y tiene como propósito identificar aquellos pacientes, desnutridos o en peligro de desarrollar desnutrición, que pueden beneficiarse de un tratamiento nutricional precoz. Se exponen los procedimientos de cribaje, evaluación, diagnóstico y clasificación de los trastornos nutricionales que propone el Servicio de Nutrición Clínica del Hospital Clínico Quirúrgico “Hermanos Ameijeiras” a la luz de los nuevos conceptos y de su propia experiencia práctica. La correcta clasificación y registro de los trastornos nutricionales contribuye a enriquecer los sistemas de registro e información hospitalarios, y se convierte en una herramienta de consulta que permite realizar evaluaciones internas en distintos periodos y con hospitales de similares características para establecer puntos de referencia comparativa.
- Rodríguez Suárez A, Jiménez Acosta SM, Domínguez Ayllón Y. Implementación de las Guías Alimentarias para niños cubanos menores de dos años de edad: cambios en las prácticas alimentarias de madres y cuidadores, 2012-2016. En: Cuba Salud 2018 [Internet]. Cuba; 2018 [citado 13 Nov 2018]. p. 1-7. Disponible en: http://convencionsalud2018.sld.cu/index.php/connvencionsalud/2018/paper/view/1494/1051.
Resumen: Introducción. Las Guías Alimentarias para niños cubanos menores de dos años de edad se desarrollaron en Cuba con el objetivo de lograr una alimentación saludable a partir del año 2012. Objetivos. El presente trabajo tuvo como propósito evaluar el impacto de su implementación en los conocimientos de las madres y los responsables de la alimentación de los menores, así como la introducción de alimentos complementarios en las distintas edades. Material y Métodos. Se realizaron dos encuestas con cuestionarios similares: la primera en el año 2012, que sirvió de “línea de base” y la otra en el año 2015, tres años después de implementadas las Guías Alimentarias. Fueron encuestadas 903 y 689 para la línea de base del 2012 y la encuesta final del 2015 respectivamente. Resultados. Un alto porcentaje de madres refirió conocerlas guías y de estas, también una alta proporción reconoció su utilidad y beneficio. El médico y la enfermera de la familia así como otras fuentes de información del sector de la salud fueron identificados por el mayor porcentaje de madres. Se encontró que 13 de las 15 variables evaluadas sufrieron modificaciones favorables después de la capacitación. Los cambios encontrados en el conocimiento de las madres sobre prácticas alimentarias fueron favorables ya que en las variables consideradas como inadecuadas, se encontró una alta significación hacia el cambio a la condición y frecuencias adecuadas. Queda por responder si los cambios en los conocimientos son suficientes para producir cambios positivos en sus hábitos alimentarios.
- Piñeiro Lamas R, Díaz Lorenzo T. Nutrición, cerebro humano y aprendizaje en los niños [Internet]. La Habana: Editorial Ciencias Médicas; 2014. 183 p. Disponible en: http://www.bvs.sld.cu/libros/nutricion_cerebro/nutricion_completo.pdf.
Resumen: –
- Jiménez Acosta SM, Martín González I, Rodríguez Suárez A, Silvera Téllez D, Núñez Torres E, Alfonso Fagué K. Prácticas de alimentación en niños de 6 a 23 meses de edad. Rev cuban pediatr [Internet]. marzo de 2018 [citado 14 de noviembre de 2018];90(1):[aprox.-22 p.]. Disponible en: http://www.revpediatria.sld.cu/index.php/ped/article/view/383/175.
Resumen: Introducción: las prácticas óptimas de alimentación del lactante y el niño pequeño se sitúan entre las intervenciones con mayor efectividad para mejorar la salud de la niñez. Las encuestas de consumo de alimentos revisten gran importancia en la detección precoz de un consumo inadecuado de alimentos y sus repercusiones sobre la salud. Objetivos: identificar las prácticas reales de alimentación complementaria, y determinar la adecuación de la ingesta de energía y nutrientes. Métodos: se realizó un estudio transversal en niños con edades entre 6 y 23 meses. Comprendió un muestreo aleatorio bietápico. Se calculó la muestra en 560 niños. Se obtuvo información sociodemográfica del niño y su medio familiar. Se aplicó una encuesta de consumo de alimentos por recordatorio de 24 horas. Resultados: se encuestaron 543 madres de niños entre 6 y 23 meses de edad. El 42,4 % de los menores de un año son amamantados con una disminución hasta el 20,9 % durante el segundo año de vida, existe bajo consumo de frutas y vegetales, los menores de 1 año de edad consumieron como promedio 914 kcal, el 45,3 % sobrepasa las recomendaciones de energía para esas edades y presenta un consumo excesivo, mientras los de 1 a 2 años consumen 1 052 kcal. Respecto a los minerales, se destaca el bajo consumo de hierro, con 51,1 % de niños con un consumo deficitario de este mineral. Conclusiones: el elevado porcentaje de niños con ingestas excesivas de energía constituye un factor predisponente a la obesidad desde las etapas tempranas de la vida.
- Barceló Acosta M. Recomendaciones alimentarias y nutricionales en el trasplante renal. Rev cuban aliment nutr [Internet]. 2014 Dic [citado 17 Dic 2018];24(2 Supl 1):S108-11. Disponible en: http://www.revalnutricion.sld.cu/index.php/rcan/article/view/214.
Resumen: El estado nutricional y los ingresos nutrimentales son inseparables de la funcionalidad y la supervivencia del trasplante renal, más si se tiene en cuenta el papel central del riñón en la absorción, el metabolismo, la utilización periférica y la excreción de numerosos (por no decir todos los) nutrientes. Llegado el momento de la decisión de la realización de un trasplante renal, muchos de los pacientes se encuentran en una fase avanzada de la enfermedad, han sufrido numerosas complicaciones (relacionadas o no con la terapia de reemplazo renal), y en su mayoría comparten importantes trastornos nutricionales. Por ello, se impone reconocer el estado nutricional del enfermo, y las causas para la ocurrencia de la desnutrición asociada a la enfermedad renal crónica (ERC), como paso previo al diseño e implementación de acciones de intervención alimentaria, nutrimental y metabólica en cada uno de los momentos del trasplante renal, o lo que es lo mismo: antes, durante y después de la colocación del injerto [RESUMEN TRUNCADO DESPUÉS DE LAS PRIMERAS 500 PALABRAS].