Sobre el estado actual de la calidad de los cuidados nutricionales en Cuba

Inicio > Del Editor > Editoriales anteriores > Editorial 12 Julio 2006

 

La aparición en el más reciente número de la prestigiosa revista Clinical Nutrition (publicación oficial de la ESPEN: European Society of Parenteral and Enteral Nutrition) de un artículo del Grupo Cubano para el Estudio de la Desnutrición Hospitalaria sobre el estado actual de la calidad de los cuidados nutricionales en los hospitales cubanos encuestados con motivo del Estudio ELAN-CUBA [1] brinda el tema del Editorial de esta edición.

Considerado como una extensión natural del primer artículo [2], este segundo trabajo explora en qué medida las prácticas de evaluación nutricional, apoyo nutricional y Nutrición artificial se corresponden con las tasas de desnutrición existentes en las instituciones hospitalarias de nuestro país. Los resultados no pudieron ser más preocupantes. Si bien la desnutrición afectó al 41.2% de los pacientes encuestados, en menos del 1.0% de las historias clínicas revisadas el diagnóstico de desnutrición quedó registrado como un problema independiente de salud. Aunque en la mayoría de las instancias estaba disponible una balanza, solo el 40.5% de los hospitalizados fue tallado y pesado al ingreso, y muy pocos fueron pesados prospectivamente a pesar de estadias hospitalarias mayores de 15 días. La indicación de exámenes bioquímicos con un interés nutricional (esto es, Albúmina/Conteo de Linfocitos) solo se realizó en menos del 20.0% de los pacientes atendidos.

Pero lo que más llamó la atención del Grupo fueron las bajas tasas (< 15.0%) de utilización de las técnicas de Nutrición artificial en pacientes que llenaban alguna de 9 indicaciones clásicas de apoyo nutricional , todo ello a pesar del tamaño pequeño de tales subpoblaciones (solo el 10.9% del total de la muestra), y que en muchas ocasiones la repleción nutricional con procedimientos de Nutrición Enteral suplementaria hubiera sido una opción costo-efectiva muy atractiva. De hecho, ninguno de los pacientes con insuficiencia orgánica crónica estaba recibiendo algún tipo de apoyo nutricional en el momento de la encuesta, a pesar de que muchos de ellos estaban incluidos en listas de espera de trasplante de órganos.

La indagación en la base de datos del Estudio ELAN-CUBA está lejos de agotarse. Están en diversas fases del proceso editorial sendos estudios para evaluar el estado actual de las técnicas de Nutrición artificial que se ejecutan en nuestros hospitales, y el estado de la prescripción dietética hospitalaria, respectivamente.

Las causas para este estado de cosas son varias, interdependientes entre sí, e incluso, pueden solaparse en su influencia. No siempre el factor económico es el determinante (aun cuando no podamos negar su importancia), por cuanto otros como el grado de conocimiento de los equipos de salud en temas de Alimentación y Nutrición, y la existencia de las estructuras necesarias para la conducción útil y segura de procedimientos de Nutrición artificial, podrían también gravitar sobre ello. En el artículo reseñado se expone un modelo que podría ayudarnos a entender mejor las complejas y (en ocasiones) caóticas relaciones que se establecen entre los determinantes del presente estado de provisión de cuidados nutricionales. Hay que hacer una salvedad imprescindible: esta situación no es privativa de Cuba solamente. Los reportes citados en la extensa bibliografía adjunta al trabajo ejemplifican con creces qué es lo que está ocurriendo en países como Canadá, los Estados Unidos, la Unión Europea, España, e incluso, la propia América Latina.

El diagnóstico de un problema es solo el primer paso hacia su resolución. Los trabajos del Grupo representan un corolario de aquel trascendental Editorial escrito por Butterworth [3]. Como se enfatiza en el artículo: “Es importante reconocer que (el presente estado de las cosas) puede ser la resultante lógica de prácticas médicas desfasadas que han prevalecido hasta el presente, y que deben revisadas, mejoradas y finalmente superadas”. Mucho nos queda por hacer, y muchos actores, organizaciones e instituciones deben involucrarse para revertir el estado actual de las cosas, y alcanzar lo que nos hemos propuesto: Una Medicina de Excelencia.

Espero que les sea útil.

Con mis mejores afectos,

Dr. Sergio Santana Porbén.
El Editor.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

[1] Porbén SS. The state of the provision of nutritional care to hospitalized patients- Results from the Elan-Cuba Study 2006;25(6):1015-29
[2] Penié JB. State of malnutrition in Cuban hospitals. Nutrition 2005;21(4):487-97
[3] 11 de Noviembre del 2015: Revisitando los clásicos: El esqueleto en el escaparate del hospital, del Dr. Charles E. Butterworth. Nutrition Today 1974;9:4-8