Inicio > Del Editor > Editoriales anteriores > Editorial 22 de Mayo del 2012
El año corriente marca el décimo aniversario de la instalación del sitio de la Sociedad Cubana de Nutrición Clínica y Metabolismo. El tiempo transcurrido me ha tomado de sorpresa, pues todavía me parece imposible que tantos años hayan transcurrido tan rápidamente. De pronto, recuerdo los pormenores que rodearon la gestación, diseño y puesta en línea de este empeño digital; y mis primeros pasos en la programación orientada a cliente remoto e INTERNET.
La festividad es propicia para reafirmar la razón de ser de este sitio como la cara de la Sociedad en la Red global de Redes, a la vez que foro para el intercambio de experiencias entre los nutricionistas cubanos de las distintas provincias del país, los latinoamericanos y los de otras regiones del mundo. El sitio de la Sociedad también ha acomodado una línea editorial donde se han tratado temas disímiles, pero todos ellos relevantes para la práctica de la Nutrición clínica. Asimismo, en el sitio ha quedado atesorada la historia de los Congresos de la Sociedad, al menos desde el año 2003, cuando se celebró el IX Congreso Latinoamericano de Nutrición Clínica, Terapia Nutricional y Metabolismo, auspiciado por la FELANPE (en aquella época reconocida como la Federación Latinoamericana de Nutrición Parenteral y Enteral); al igual que se han abierto espacios para reflejar la actividad de los capítulos que la Sociedad ha ido fundando a lo largo del país. En menor escala, el sitio de la Sociedad ha ofrecido recursos para la educación continuada y la formación de recursos, y servido como puerta de entrada para la Revista Cubana de Alimentación y Nutrición, ahora en una nueva etapa de su historia como un proyecto digital compartido.
Como se desprende de la lectura de estas líneas, mucho se ha hecho. Pero la eterna insatisfacción que me caracteriza me conduce a decir que se debería haber hecho aún más, máxime en un escenario donde existen pocos canales (y que la discreción me proteja si afirmo que no existe ninguno) para la difusión de contenidos racionales sobre la alimentación y la nutrición del enfermo.
El décimo aniversario del sitio de la Sociedad Cubana de Nutrición Clínica y Metabolismo debería ser motivo de alegría y regocijo, y ciertamente lo es, pero no se puede hablar que podamos trazarnos nuevas metas para completarlas en los próximos diez años, y nuestras aspiraciones y expectativas deben atemperarse a las circunstancias corrientes.
Hoy las condiciones de conectividad impiden un mejor diseño de la apariencia del sitio de la Sociedad, y la navegación dentro del mismo. Las limitaciones de espacio en el servidor que alberga el sitio (que solo dispone de 20 Mb para sus contenidos: el tamaño de un disco duro de la primera generación de computadoras, algo risible sin dudas cuando un escolar porta una memoria flash de 8 Gb) imposibilitan colocar más recursos que son imperiosamente necesarios para el nutricionista. Ni que decir que, en un mundo como el actual, en el que las redes sociales están sustituyendo al correo electrónico y otras formas tradicionales de comunicación entre usuarios remotos, y FACEBOOK y TWITTER son herramientas imprescindibles para llegar a todos los interesados, debemos seguir postergando la aprehensión y explotación de estas oportunidades. La apertura de nuevos vínculos hacia otros espacios, recursos y graneros digitales está supeditada a engorrosos procedimientos dizque para no saturar una banda ya de por sí muy estrecha, pero que sin dudas se convierten en obstáculos formidables para cualquier proyecto de expansión del sitio de la Sociedad. Y sobre todas las cosas, el mantenimiento del sitio de la Sociedad sigue siendo una labor de voluntariado, que implica sacrificio, altruismo y renuncias.
Pero a pesar de todo, no vacilo en calificar estos diez años como Editor del sitio de la Sociedad Cubana de Nutrición Clínica y Metabolismo como los más emocionantes e intensos de mi existencia. Renuevo, pues, mi compromiso con la Sociedad desde este humilde puesto. El hecho de que el sitio exista, viva y respire es en sí mismo un logro inmenso.
Espero que les sea útil.
Con mis mejores afectos,
Dr. Sergio Santana Porbén.
El Editor.