Por: MsC. Olga Lydia Paz Figueroa.
Cuando ha trascurrido un año de la desaparición física de la cubana de pura cepa que desde muy joven se integró a la lucha clandestina, buscada por los órganos represivos, al resultar un combatiente activo contra los auténticos en el poder y la dictadura batistiana, con orgullo vemos multiplicada su actuación y compromiso con el tiempo histórico, al conocer del despliegue de tantas profesionales y técnicos de la salud que se enfrentan al más terrible enemigo actual que arrasa con la vida de millones de seres humanos en el planeta. Leer más