Cuba se une a la respuesta al llamado del Secretario General de la ONU a los países para priorizar la educación, la alimentación, la salud y la seguridad de los niños en medio de la pandemia COVID-19.
La iniciativa fue lanzada por la UE, GRULAC y el Grupo de Amigos de los Niños y los ODS* con el fin de proteger a los niños y niñas que como causa de la COVID-19 se encuentran en situaciones de mayor vulnerabilidad.
Apoyamos firmemente el llamamiento del Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, para que los países den prioridad a la educación, la alimentación, la salud y la seguridad de los niños en medio de la pandemia de COVID-19. En este sentido, acogemos con beneplácito la publicación del Resumen de Políticas del Secretario General de las Naciones Unidas, así como el Programa de Acción complementario emitido por UNICEF, cuyo objetivo es proteger a los niños más vulnerables.
Expresamos nuestra profunda preocupación respecto a los efectos adversos que la pandemia de COVID-19 tiene actualmente y seguirá teniendo en el bienestar, el desarrollo y la protección de los niños, incluido su acceso a la educación, la alimentación, la seguridad y la salud, especialmente sobre aquellos que se encuentran en situaciones de vulnerabilidad.
Somos conscientes de que las medidas introducidas para prevenir la propagación de COVID-19 pueden exponer a los niños a numerosos riesgos de protección.
Nos preocupan los efectos nocivos que se espera que tenga la pandemia para los niños de los países más pobres, en los hogares más pobres dentro de los países y en las niñas dentro de los hogares más pobres, así como también los riesgos devastadores causados por la pandemia para los niños en contextos humanitarios y afectados por conflictos armados.
Somos conscientes de que los efectos de la pandemia y las medidas preventivas tomadas pueden suponer un desafío para la implementación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y para garantizar el pleno disfrute de los derechos del niño. En ese sentido, reiteramos nuestro firme compromiso de no dejar a nadie atrás; de no dejar a ningún niño atrás.
Por lo tanto, debemos trabajar juntos para proteger a todos los niños y actuar ahora para prevenir y mitigar cada uno de los riesgos que enfrentan, para garantizar el acceso a una educación inclusiva y de calidad, nutrición y atención médica, así como fortalecer los sistemas de protección social. Debemos prevenir y combatir todas las formas de violencia, incluida la violencia doméstica, el abuso y la explotación sexual de niños en línea y fuera de línea, el acoso cibernético y cerrar la brecha digital. Reconocemos los efectos específicos que tiene la crisis en el acceso de las niñas a la educación y en la violencia de género. Deberíamos hacer todo lo posible para amortiguar el impacto en el bienestar de los niños, especialmente para aquellos cuya vulnerabilidad ha aumentado como resultado de las circunstancias actuales.
Nos comprometemos a respetar, promover y proteger plenamente los derechos de todos los niños, reducir los impactos negativos durante y después de la pandemia, así como a garantizar el respeto por el interés superior del niño, mientras nos esforzamos por tener en cuenta, cuando sea posible, las opiniones de los niños.
Reconocemos que los niños y los jóvenes son agentes de cambio positivos y nos comprometemos a asociarnos con ellos ahora y en el futuro, para aliviar el impacto duradero que el COVID-19 tendrá en la salud humana, en la sociedad y la economía y asegurar un futuro y un planeta saludables, seguros y sostenibles para todos, en línea con la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Estamos comprometidos a trabajar juntos en solidaridad, a través de naciones y generaciones, para abordar los desafíos globales. Acogemos con beneplácito el trabajo del sistema de las Naciones Unidas que trabaja en todos los entornos y actúa como una sola ONU para defender los derechos del niño en el corto corto y largo plazo. Nos comprometemos asimismo a seguir trabajando con todos los socios en todos los niveles para garantizar que los niños puedan alcanzar su máximo potencial y construir un futuro mejor.
*63 miembros del Grupo de Amigos de los Niños y los ODS se unieron a la iniciativa