Clínica Estomatológica Docente “Yuri Gómez Reinoso”.

*** BIOGRAFIA: YURY GOMEZ REINOSO ***Yuri_Gomez_Reinoso

Yuri Gómez Reinoso. Combatiente de la Policía Nacional Revolucionaria, asesinado por elementos contrarrevolucionarios que intentaban robar una embarcación en la base náutica de Tarará, para salir ilegalmente del país.

Síntesis biográfica

Nació el 5 de julio de 1972 en el municipio de Guanabacoa, en La Habana. A los dos años de edad fue llevado a vivir en el reparto de Alamar en el municipio Habana del Este, creció en el seno de una familia comunista guiándolo en el amor a la Revolución.

En 1974 ingresa en el círculo infantil HerthaKuosine. Realizó sus estudios primarios y secundarios en la escuela primaria NadiezkaKrupzcaia y República Popular de Angola respectivamente, graduándose posteriormente de preuniversitario en el Instituto José Martí de la ciudad de La Habana.

Impedido por una afección asmática no pudo ingresar a la escuela de pilotos de caza inclinando su vocación por la vida militar en las filas del Ministerio del Interior (MININT) al cual ingresó por la vía de Servicio Militar General el 1 de agosto de 1990. Donde fue destinado al cuerpo de orden público como agente de la policía desde febrero de 1991 en el municipio Habana del Este.

Era un joven responsable y cumplidor, de carácter alegre y jovial, ganándose el cariño y el respeto de sus compañeros. Su amor por los padres y hermanos era profundo como su entrega a la Revolución.

Cuando solicitó su ingreso a las filas del MININT expresó:

“Mi futuro trabajo, es en el MININT, prestándole a la Revolución todo mi aporte en la lucha del pueblo para acabar con la delincuencia que tanto mal hace a la Revolución.”

Durante su tiempo de servicio cumplió satisfactoriamente todas las tareas encomendadas. Fue un joven combatiente disciplinado y responsable. Fue ascendido al grado de Sargento de Tercera.

Muerte

En la madrugada del 9 de enero de 1992, cuando Yuri Gómez (19) cumplía con su servicio de guardia en el puesto fronterizo Base Náutica de Tarará junto a los combatientes Orosmán Dueñas Valero (20), Rafael Guevara Borges (29) y Rolando Pérez Quintosa (23), un grupo de elementos contrarrevolucionarios que intentaban robar una embarcación para salir ilegalmente del país los atacó en la oscuridad y los desarmó. Los amarraron a los cuatro y tras breve deliberación, los ametrallaron. Dueñas Valero, Gómez Reinoso y Guevara Borges fallecieron en pocas horas, y Pérez Quintosa resultó herido de muerte (con cuatro impactos en el abdomen) y falleció el 16 de febrero de 1992.

“Asesinar es repugnante; asesinar a hombres desarmados y amarrados es monstruoso” Fidel Castro en el entierro de Rolando Pérez Quintosa

El pueblo cubano rindió homenaje y tributo a este revolucionario cubano.

 

Otorgamientos

Por sus valores y probados méritos revolucionarios se le otorgó Post – Mortem la militancia en la UJC, la Medalla del valor, la Orden Julio A Mella, y el Sello 20 años de Vigilancia Revolucionaria que otorgan los Comités de Defensa de la Revolución (CDR).

Fuente

Proyecto Identidad Historia de la Habana del Este Autores: Rolando j. Rensoli Medina, Ernesto H. García Gutiérrez, Wilfredo Sánchez Núñez y otros autores. 2002

marzo 21/ 2018 (Ecured)

https://www.ecured.cu/Yuri_G%C3%B3mez_Reinoso

El crimen de Tarará

Por Andrés García Suárez –

9 enero, 2018

El 9 de enero recordamos un crimen espantoso. Ocurrió en 1992 y la motivación fue una Ley norteamericana que permitía que cualquiera que llegase a Estados Unidos, por cualquier vía ilegal y aunque hubiera delinquido para hacerlo, sería bienvenido y recibiría todos los beneficios que jamás concedieron a latinoamericano alguno. Era la Ley Helm Burton, que después reforzó en su maldad la Torricelli. El imperialismo norteamericano las aprobó mediante sus mecanismos “democráticos”, para promover la salida de cubanos para manejarlo en sus campañas mediáticas como cuestión política.

Un grupito de elementos marginales de la sociedad estudió durante varios días la manera de penetrar en la Base Náutica de Tarará, en esa playa habanera, para apoderarse de una embarcación e ir a La Florida. Así lo hicieron mediante engaño y sorpresa, y capturaron a los custodios.

Éstos eran todos jóvenes: los sargentos de la Policía Nacional Revolucionaria, Rolando Pérez Quintosa y Yuri Gómez Reinoso; el miembro de Tropas Guardafronteras, Orosmán Dueñas Valero; y el agente del Cuerpo de Vigilancia y Protección, Rafael Guevara Borges.

Todos fueron amarrados por sus captores y estando así indefensos, sin razones para hacerlo, los ametrallaron y los abandonaron desangrándose. Tres de ellos murieron en el acto. Sólo Rolando Pérez Quintosa sobrevivió pocas semanas, pero pese a todos los cuidados de la ciencia, falleció. Fueron semanas en que, dramáticamente, los cubanos, cada amanecer, inquiríamos en los medios de prensa y entre vecinos y compañeros de labor acerca del estado crítico del joven que agonizaba. Pero éste, antes de morir, identificó a uno de los asesinos.

Se trataba de un delincuente, un violador reiterado que realizó algunas de estas fechorías en la zona de Tarará y estaba siendo buscado. Ni este, ni ninguno de sus cómplices escaparon de la implacable persecución de los órganos de la Seguridad del Estado y del pueblo conmovido por el crimen múltiple. Los autores de los asesinatos fueron juzgados y fusilados. Sus cómplices, incluidas algunas mujeres, fueron condenados a prisión. Ninguno pudo salir del país porque todas las embarcaciones estaban protegidas para que no pudieran ser operadas por merodeadores, y eso lo desconocían los autores de estos hechos.

Una de las víctimas de este horrendo crimen era un cienfueguero: Orosmán Dueñas Valero, oriundo de Guasimal, en el municipio de Abreus. Allí nació, creció, estudió y se hizo revolucionario. Era el mayor de sus hermanos y compartió la alegría de tener una familia donde padres y abuelos eran revolucionarios, y tíos y primos eran internacionalistas con misiones de todos tipos.

Por la familia en que crece y los maestros que colaboraron en su formación, por los vecinos y amigos que influyeron con su ejemplo en su desarrollo ciudadano, Orosmán se formó como un joven sano y justo, alegre y responsable, un producto genuino de la Patria en que nació. Por eso al llegar a la edad de su Servicio Militar Activo, fue designado para el Ministerio del Interior. Así eran también los otros tres jóvenes revolucionarios de nuestro austero y glorioso tiempo de Revolución, que resultaron víctimas de la maldad de sus agresores. Todos estos compañeros de martirologio estaban en las filas de los buenos patriotas y eran apreciados en sus barrios tanto como queridos por sus familias, y ahora por el pueblo cubano que honra a sus héroes y mártires.

De esta historia triste que hoy recordamos queda una enseñanza para siempre, para todos los tiempos: los cubanos debemos permanecer unidos y estar siempre alertas y desconfiados, porque la maldad de un enemigo empecinado, implacable y artero, sabe cómo calar en las mentes débiles, engañar a personas ignorantes y egoístas, de bajos sentimientos, que pueden provocar hechos como el que marca hoy el almanaque y no debemos olvidar.

marzo 21/ 2018 (Periódico 5 de Septiembre)

http://www.5septiembre.cu/el-crimen-de-tarara/

Terrorismo, es terrorismo

9 enero 2017 | 4 Comentarios

Yuri Gómez Orosmán Dueñas y Rafael Guevara fueron velados en el edificio del Ministerio del Interior, adonde el pueblo acudió a rendirles homenaje. Foto: Archivo Granma

Por José Luis Alonso Lanza

A 25 años de los acontecimientos ocurridos en la base náutica de Tarará, donde cayeran los hermanos Yuri Gómez Reinoso, Orosmán Dueñas Valero y Rafael Guevara Borges, no nos debe caber ninguna duda, que lo sucedido en aquella noche de enero del 1992, no fue un acto fortuito, un simple acto delictivo, ni mucho menos un ajuste de cuentas.

Un aparte fue para Rolando Pérez Quintosa, quien luego de ser atacado, permaneció varias semanas en el hospital en una constante lucha por la vida. pero las heridas fueron mayores, por lo que fue un cuádruple asesinato.

Aquella madrugada del 9 de enero del 1992, se cosechaba, una vez más, el arduo trabajo desplegado a través de Radio Martí, y otros medios de difusión masiva de Estados Unidos, así como sus agentes, la claque bien pagada de la mal llamada disidencia, en la promoción de una inmigración no controlada, fundamentada en la Ley de Ajuste Cubano1, la ley de pies mojados y pies secos, ley aplicada a cualquier nativo o ciudadano de Cuba, que haya sido inspeccionado y admitido o liberado en los EEUU, haciéndolo admisible como residente permanente en EE.UU.

Esto es interesante ante la idea que determina que la inmigración en los Estados Unidos…, los aspectos económicos, sociales, y políticos de la inmigración han causado gran controversia con respecto a la etnicidad, los beneficios económicos, puestos de trabajo para no inmigrantes, los patrones de asentamiento, el impacto en la movilidad social ascendente, la delincuencia y el comportamiento electoral. En términos “per cápita”, los Estados Unidos permiten la entrada de un menor número de inmigrantes que la mitad de los países de la OCDE.

Yo no sé usted cubano, pero este que está aquí, escribiendo estas líneas, rememorando aquellos sucesos, como otros, donde la muerte ha sido protagónica, puedo decirles que eso no es más que el resultado de un terrorismo patrocinado por un Estado. Las acciones son ejecutadas por entidades no gubernamentales, mas todo es sufragado, dirigido, instigado o protegido por un Estado altamente reconocido internacionalmente.

A lo ocurrido en 9 de enero del 1992, como otras acciones donde se han perdido vidas humanas, tienen las raíces en una ley promulgada y aprobada por el congreso de EE.UU., por lo tanto, considero que a su vez, estamos, analizando el contexto, tanto ante terrorismo patrocinado por un estado, como terrorismo de estado, en fin de cuentas, como bien decía mi abuela, el dueño de la vaca es el dueño del ternero.

¿Cuántos barcos con inmigrantes haitianos o de otras etnias del Caribe, han sido devueltas a sus países al tocar costas de EE.UU.? ¿Cuántas veces ha sido devuelto a Cuba un grupo de balseros? ¿Cuántos cubanos han perdido la vida tratando de llegar al “país de las oportunidades” en busca del “sueño americano” en rudimentarias balsas?

Ningún haitiano o de otra etnia caribeña, es aceptado en EE.UU., de inmediato son devueltos a sus países de orígenes, más ¿cuántas veces han llegado a los EE.UU., cubanos que han cometido hechos violentos y han sido recibidos como héroes? ¿Cuántas veces han sido reenviados a Cuba o enjuiciados por los hechos cometidos?

Terrorismo, es terrorismo, y tal y como expresara Fidel en su discurso por el duelo a las víctimas de Tarará, los ejecutores del crimen de la madrugada del 9 de enero de 1992, no solo pensaban llevarse una embarcación para llegar al deseado destino, sino que si para lograrlo, era preciso asesinar, lo harían.

Es lógico cubano, que ante las “facilidades” para llegar y establecerse en Estados Unidos, existan personas que arriesguen sus vidas en el intento, y otras que además de arriesgar las suyas, ponen en peligro la de otros.

Hoy conocemos, a pesar de nuestras relaciones diplomáticas y de todo lo avanzado en varios temas, la Base de Guantánamo sigue en manos de los EEUU, el bloqueo persiste, en toda su magnitud, y a pesar de todos los acuerdos sobre inmigración, la Ley de Ajuste Cubano, sigue vigente, promoviendo actos de terrorismo en contra de nuestro país, la incitación a nuestros profesionales a desertar con el famoso parole para los médicos, en misión por todo el mundo.

Como bien establece una crónica de Juventud Rebelde de Enero del 2007: “Queda por hacer justicia con la desajustada Ley de Ajuste Cubano, engendro promotor de monstruosidades como la ocurrida en Tarará y de otros terribles desgarramientos del pueblo cubano”.

1 La Ley de Ajuste Cubano (en inglés, Cuban AdjustmentAct, CAA), Ley Pública 89-732, es una ley federal de los Estados Unidos promulgada el 2 de noviembre de 1966. Aprobada por el 89.º Congreso de los Estados Unidos y firmada por el presidente Lyndon Johnson

Marzo 21/2018 (Cubadebate)

http://razonesdecuba.cubadebate.cu/articulos/terrorismo-es-terrorismo/