Esta nueva tecnología, desarrollada en ratones, facilita la administración de fármacos terapéuticos para el tratamiento de patologías que afectan al sistema nervioso central. Lo consigue al atravesar de forma precisa la barrera hematoencefálica, encargada de restringir el paso de sustancias tóxicas entre la sangre y el cerebro. Las enfermedades del sistema nervioso provocaron un total de 27 508 fallecimientos durante 2020 en nuestro país, según datos del INE. Dentro de esta categoría, encontramos patologías tan conocidas como el alzhéimer, el párkinson, la esquizofrenia o la esclerosis múltiple. leer más