La Asociación Latinoamericana de Medicina Social y Salud Colectiva (ALAMES) se pronuncia por la paz en el mundo

Condenamos el conflicto armado y solicitamos el cese inmediato de toda acción bélica en Ucrania. La intensificación de este conflicto está poniendo al mundo al borde de una guerra donde los pueblos serán los únicos que pondrán las vidas, y los mercados, una vez más, harán crecer sus ganancias.

El análisis de este momento, no puede ni debe limitarse a partir de una mirada fotográfica del momento en que Rusia decide intervenir militarmente. Se debe también comprender la amenaza creciente y la existencia de una guerra que cuenta con más de 13,000 muertes y 8 años de angustia sostenidas para los pueblos del Donbass. Años, en los que creció la inseguridad por el ascenso de los intereses guerreristas en estos territorios, motivo por el cual se ha intensificado este conflicto que ahora pone en peligro a toda la humanidad. El no cumplimiento de los acuerdos de Minsk y las intervenciones de la OTAN son los elementos más cercanos que explican el agravamiento del conflicto.

No hay que olvidar que Bielorrusia y Ucrania (y no menos de 15 naciones más con anterioridad) obtuvieron la condición de Estado por primera vez, como resultado de la Revolución de Octubre dentro de las repúblicas de la URSS. Y no fue hasta 1991 que obtuvieron la independencia total (también de Rusia).

El modelo capitalista acumula una larga historia de guerras generadas cada vez que tiene una crisis compleja que supera sus capacidades de resolverla, apelando por ello con la misma periodicidad a su alianza de clase con el complejo militar industrial. Este conflicto no es una excepción: Estados Unidos perdida su hegemonía económica, trata de no perderla a nivel militar y diplomático.

ALAMES repudia, también, el accionar irresponsable e imperialista de todas las potencias que incentivan la guerra, lejos de sus territorios, como ha sido la práctica histórica de Estados Unidos, del Reino Unido, y de la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte). Tampoco olvidamos los horrores de la llamada “Guerra Fria”, de las guerras de Corea, de Viet Nam, Irak, Libia, Siria, Afganistán, entre otras muchas.

Luego del fracaso de su estrategia sanitaria (Covid 19) en su frente interno, Estados Unidos necesita apelar a un “warfare” (mecanismo de recuperación económica) a partir de

  1. Exportaciones de la industria bélica, sin pagar el precio de un conflicto en su propio territorio y; ALAMES en América Latina, actúa y construye desde una fuerte vocación de paz. Somos hoy un territorio de paz entre nuestros países, a pesar de injerencias imperialistas como el bloqueo a Cuba, la ocupación del territorio de Islas Malvinas y otras islas del Atlántico Sur, la promoción de golpes de estado como en Bolivia y Honduras, para citar solo los mas recientes y la proliferación de bases militares en varios de nuestros países.

Es por ello que ALAMES, se pronuncia por la paz, el cese inmediato de las acciones bélicas, y la solución diplomática del conflicto localizado en esta etapa en Ucrania y Rusia, centrada en el respeto de la soberanía, la multiculturalidad y los intereses populares.

Nuestra larga lucha por el ejercicio del derecho a la salud para nuestros pueblos y nuestro compromiso de aportar a la construcción de una América Latina sin guerras, ni otras formas de violencia, nos habilita a decir que la paz y la renuncia a la guerra y la agresión, son la primera condición para el buen vivir de los pueblos.

Nadie tiene razón y todos tienen razones. Y nuevamente muertos inocentes pagan y pagarán el precio mientras los sobrevivientes acumulan odios que sembrarán otras guerras.

Abogamos por la solución pacífica de los conflictos, la Autodeterminación de los Pueblos, el respeto a la soberanía popular, la independencia económica y la justicia social para todos los pueblos del mundo.

ALAMES, 1º. DE MARZO DE 2022