Se conoce como “El Hipócrates de Holanda”o “el Maestro de Europa”. Son pocas las personas que en vida tienen reconocimiento fuera de sus países. Una de esas figuras fue Herman Boerhaave, a quien en el siglo XVIII se le consideró la figura médica más respetable de Occidente y se le denominaba “el Maestro de Europa”, a pesar de que nunca salió de su Holanda natal. Resaltó la importancia del proceder sistemático y del criterio médico, lo que tuvo impacto en varias generaciones de médicos en todo el mundo.
Herman Boerhaave nació en Holanda en 1668. Era el mayor de nueve hermanos. Su padre era un pastor protestante, quien le enseñó desde la gramática hasta el trabajo en el campo. Estudió en la escuela pública de Leiden, donde fue el mejor alumno. La temprana muerte de su padre y las limitaciones económicas no fueron barrera para que fuera aceptado en la universidad, donde inició estudios de Teología y Filosofía. Su capacidad de trabajo y su brillo intelectual lo acercaron a los más famosos profesores. Se graduó en Filosofía en 1690.