La inteligencia artificial (también conocida como IA) ya no es ciencia ficción, es parte de nuestro día a día y va a tener un papel muy significativo en el futuro de la tecnología mundial.
El significado del término inteligencia artificial ha estado motivo de debate durante muchos años y han aparecido muchas definiciones al respecto. Pero, aún no existe una definición exacta y aceptada, ya que se trata de un término muy genérico en el mundo de la informática. Podríamos decir que se trata de cualquier técnica que permita a los ordenadores dar sentido a los datos de la misma manera que lo hacen los humanos. No pretenden sustituir ni reproducir el funcionamiento del cerebro humano, sino el que busca ampliar sus capacidades. Lo que se busca con la IA es seleccionar los puntos fuertes de los humanos, junto a la capacidad informática de las máquinas, conseguir soluciones colaborativas y obtener finalmente una interacción más natural entre humano y máquina.
La inteligencia artificial es el campo científico de la informática que se focaliza en la creación de programas y mecanismos que puedan mostrar comportamientos considerados como inteligentes. Es decir, es el concepto que resume que las máquinas tienen la capacidad de pensar como las personas, aprenden de manera autónoma o semiautónoma a partir de grandes bases de datos (Big Data), identifican patrones y tendencias y formulan predicciones con rapidez y precisión.
Al integrar análisis predictivos y otras técnicas de IA conseguimos que nuestro día a día sea más inteligente. ¿Cómo? Te damos algunos ejemplos:
Los asistentes de Smartphone (como Siri o Cortana), al usar procesamiento de lenguaje natural, funcionan como verdaderos asistentes personales.
Aplicaciones como Facebook, Google Fotos, el sistema de galería de Iphone o Instagram, sugieren el agrupamiento de fotos con base en el reconocimiento facial de la imagen, la geolocalización y la temática.
Con el marketing automation, muchos ecommerce ofrecen recomendaciones exclusivas de productos basadas en modelos de cestas de compra e intereses. Al igual que las plataformas de series y películas como Netflix, HBO o Amazon Prime, sugieren series y películas que pueden gustarte en función de los datos obtenidos de visualizaciones anteriores (temáticas, tendencias de grupo,…).
Cada vez más, la inteligencia artificial forma parte de nuestras vidas de manera implícita y a la vez, se está ampliando el mercado laboral para los profesionales formados en educación STEM (el acrónimo de los términos Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas en inglés).
Niveles de Inteligencia Artificial
IA Fuerte (Strong AI): podemos ver este nivel como el más futurista y más cercano a las películas de ciencia ficción. En este tipo de inteligencia artificial se intenta simular y superar los seres humanos hasta el punto de conseguir sistemas con consciencia propia y capaces de resolver cualquier problema. Replicaría completamente la inteligencia humana hasta el punto de superarla.
IA Floja (Weak AI): en cambio, la Weak AI es capaz de estudiar y resolver problemas de razonamiento definidos y acotados. La mayoría de la IA utilizada actualmente se encuentra en este nivel ya que se encarga, como hemos mencionado, de resolver problemas específicos. Muchas veces pueden resolverse de una mejor manera de la que lo haría un humano. Es en este nivel donde encontramos los algoritmos más comunes en IA de aprendizaje automático (Machine Learning) o aprendizaje profundo (Deep Learning).
La Inteligencia Artificial a través del tiempo
Aunque parezca un concepto muy futurístico y moderno, más bien propio de películas de ciencia ficción, en realidad la IA se formalizó como tal en 1950 gracias a Alan Turing.
Turing fue un matemático, lógico, científico de la computación, criptógrafo y filósofo británico. Y se considera que debido al instrumento que inventó, la máquina de Turing (un dispositivo que manipula símbolos sobre una cinta en consonancia a una tabla de reglas), es uno de los padres de la ciencia de la computación y precursor de la informática moderna.
En 1956, un grupo de científicos (John McCarthy, Marvin Minsky y Claude Shannon) se reunieron para celebrar la Conferencia de Darmouth, en la universidad privada de Darmouth College, en Hanover, EEUU. En este evento, fue donde se bautizó el concepto de “la ciencia e ingenio de hacer máquinas inteligentes, especialmente programas de cálculo inteligentes” como Inteligencia Artificial.
Una década más tarde, en 1965, Joseph Weizenbaum del MIT creó a ELIZA, el primer bot conversacional. Se creó para pretender engañar a un humano haciéndole pensar que estaba hablando con otra persona.
Otro científico del MIT, Ian Horswill, creó el primer robot móvil en 1993. Lo bautizó como Polly y era capaz de moverse a velocidades similares a los animales usando la visión artificial para su navegación.
En los años 90, las grandes compañías tecnológicas decidieron hacer grandes inversiones en investigación en el campo de la IA. También surgieron los agentes inteligentes, entidades capaces de percibir el entorno, procesar percepciones y responder o actuar en el entorno de manera racional y que más tarde darían cabida a la creación de chatbots o asistentes virtuales.
Uno de los eventos clave en la historia de la inteligencia artificial, sin duda fue el segundo match disputado entre Deep Blue (un ordenador de IBM) y Gari Kaspárov (campeón del mundo de ajedrez del 1985 al 2000) en 1997, dónde el ordenador consiguió ganar al Gran Maestro de ajedrez.
Inteligencia artificial en el siglo XXI
Durante la primera década del siglo actual, el programa ALICE (Artificial Linguistic Internet Computer Entity) ganó el premio Loebner al Chatbot más humano. Y también fue durante la primera década cuando apareció TiVo, la primera tecnología de recomendaciones.
Años más tarde, en 2011, grandes multinacionales como Apple, Google y Microsoft lanzaron al mercado aplicaciones móviles de recomendaciones.
El futuro de la inteligencia artificial
El futuro siempre produce incertidumbre y en un campo tan controvertido como este, las especulaciones son muchas. Pero el Future of Humanity Institute, el centro de investigación interdisciplinario de la Universidad de Oxford, ha realizado un estudio con 352 científicos e investigadores expertos en IA y han extraído unas predicciones que parece ser que pueden cumplirse:
En 2024, la inteligencia artificial superará a la inteligencia humana a la hora de traducir idiomas.
Se cree que en 2026 las máquinas serán capaces de escribir comentarios de texto mejor que los alumnos de bachillerato.
Conducir un camión, a partir de 2027, será más seguro que lo haga una máquina a que lo haga una persona. Se reducirá la tasa de accidentes de manera significativa.
La IA en el comercio superará a los vendedores humanos en 2031.
En 2049 las máquinas con inteligencia artificial serán capaces de escribir best sellers. ¿Te imaginas comprar un libro escrito por un robot?
Entrar al quirófano será de lo más seguro, en 2053, cuando los robots tengan la capacidad de realizar cirugías.
E incluso se prevé que en 2057 podrán llevar a cabo sus propias investigaciones científicas.
Y aunque son muchos los que vaticinan una gran evolución de la IA en los próximos 40 años, debido a la aceleración del desarrollo de esta tecnología, lo cierto es que nadie puede asegurarlo al 100 % y que deberemos esperar para ver como evoluciona. ¿Emocionante, verdad?