Día Mundial del Riñón.
Se celebra cada segundo jueves de marzo desde el año 2006, como una iniciativa conjunta de la Sociedad Internacional de Nefrología (International Society of Nephrology, ISN) y la Federación Internacional de Fundaciones Renales (International Federation of Kidney Foundations, IFKF). La misión de esta conmemoración es dar a conocer la importancia de los riñones en nuestra salud y lograr reducir la frecuencia y el impacto de las enfermedades renales y los problemas de salud asociados con estas enfermedades en todo el mundo.
Más de quinientos millones de personas en todo el mundo, casi una de cada diez, padecen algún tipo de trastorno relacionado con el riñón y cada año millones de personas mueren prematuramente por episodios cardiovasculares en los que está implicada la enfermedad renal.
Actualmente, las enfermedades crónicas no transmisibles (en particular las cardiovasculares, hipertensión, diabetes mellitus y la enfermedad renal crónica) han desplazado a las transmisibles como la principal amenaza a la salud pública y al presupuesto de salud en todo el mundo. El costo de tratamiento de estas enfermedades crónicas, alrededor del 80% de un buen número de presupuestos de
atención de salud, representan una importante amenaza a la salud pública y los recursos de atención de salud en todo el mundo. La única respuesta mundial posible a la actual crisis socioeconómica y de salud, es la prevención de estas enfermedades.
Se entiende como lesión renal aguda a la abrupta reducción de la función renal definida como una elevación absoluta de la creatinina sérica igual o superior a 0.3 mg/dl, con un porcentaje de elevación igual o superior al 50 por ciento, o a una reducción en la producción de orina. La lesión renal aguda abarca todo el espectro del síndrome incluyendo insuficiencia renal aguda, necrosis tubular aguda y otras
condiciones menos graves.