Biografía: Fidel Ilizástigui Dupuy.

Fidel Ilizástigui DupuyBiografía de Fidel Enrique Ilizástigui Dupuy, maestro de la docencia médica revolucionaria. Datos tomados del Secretariado de la Academia de Ciencias de Cuba

Fidel Enrique Ilizástigui Dupuy nació el 23 de marzo de 1924, en el Central San Antonio en el Municipio de Jamaica, Provincia de Oriente, hoy Central Manuel Tames de la Provincia de Guantánamo, en el seno de una humilde familia obrera. Su padre fue carpintero y su madre, ama de casa, por lo que vivían en una situación precaria al ser siete hermanos y estar expuestos a los períodos de tiempo muerto de la actividad azucarera de aquellos tiempos.

La Enseñanza Preuniversitaria la realizó en el Instituto de Segunda Enseñanza de Guantánamo, entre 1939 y 1944, y se graduó en este último año de Bachiller en Ciencias y Letras con el grado de Sobresaliente y Primer Expediente de su curso. Con grandes esfuerzos familiares, logra salir adelante en los estudios, pues su padre no tenía trabajo fijo, lo que repercutía dramáticamente en la economía de la casa, teniendo necesidad de comenzar a trabajar, lo que realiza como repartidor del periódico Información a sus suscriptores en la ciudad de Guantánamo.

En 1944, se traslada a la Capital y matricula en la Facultad de Medicina de la Universidad de La Habanay se gradúa de Doctor en Medicina el 17 de octubre de 1951. Desde el inicio de la Carrera , tuvo inclinaciones docentes, por lo que fue alumno ayudante de la Cátedra de Bacteriología, entre 1945 y 1946, y pasó con igual categoría a la Cátedra de Patología Médica con su Clínica de 1946 a 1951, definiéndose ya el extraordinario Internista que alcanzaría a formarse en breve tiempo. De las 36 asignaturas cursadas, 30 fueron con resultados de Sobresaliente y 6 de Notables. Obtuvo 9 premios ordinarios y los ejercicios de grado fueron calificados de Sobresalientes, autorizándose la tesis para su publicación. Ocupó, por suexpediente académico, el tercer lugar en el escalafón de los graduados de su curso.

Su extracción social humilde, las vicisitudes familiares de su niñez, su temprano inicio laboral con sólo 13 años, entre otras condicionantes por la situación existente en una ciudad del interior del país como Guantánamo, influyeron notablemente en su pensamiento social y revolucionario futuro. Así describe el profesor en su autobiografía aquellos momentos: “… la situación de la clase trabajadora, la politiquería y la Segunda Guerra Mundial, me hicieron ver más claro el problema ideológico-político de nuestra era. Comencé a admirar a la URSS, decidí abrazar la ideología del proletariado. En el año 1944 ingresé en el Partido Socialista Popular”. Este joven de sólo 21 años, que iniciaba sus estudios de Medicina en La Habana, se une al Partido Socialista Popular (PSP), el partido de Blas Roca Calderío, de Carlos Rafael Rodríguez por sólo mencionar algunas de las figuras cimeras del movimiento revolucionario de la década del 40, a quienes agradecería el hecho de que…”con el ejemplo de sus vidas nos educaron en la práctica, y nos indicaron el derrotero a seguir en las nuestras”.
Durante la etapa de 1945 a 1951, se integra a las actividades político- estudiantiles siguiendo las orientaciones del PSP, participando en las luchas por el adecentamiento de la Universidad , en las batallas del estudiantado universitario por las grandes reivindicaciones patrióticas y sociales como fueron la Asamblea Constituyente Estudiantil, la lucha contra el aumento del pasaje, contra el Canal Vía Cuba, las huelgas estudiantiles en apoyo al movimiento obrero, las luchas políticas contra los gobiernos de Grau y Prío Socarrás, participando en la Sociedad Nuestro Tiempo y las campañas organizadas en Cuba a favor de la paz internacional.

Una vez graduado, mantiene su participación activa en las luchas políticas de la Universidad, en el Hospital Calixto García y en el Colegio Médico Nacional, orientado por el Núcleo del PSP, ubicado en el antiguo Centro Benéfico Jurídico de los Trabajadores de Cuba. Durante esa época, fue Secretario de la Asociación de Internos y Residentes del Hospital Universitario (AMAI), desde la que denunció y mantuvo una posición firme contra el golpe militar reaccionario del 10 de marzo.

Durante esta época, fue un activo colaborador de los estudiantes, quienes se enfrentaban a la dictadura de Fulgencio Batista y uno de los médicos de confianza del Directorio Revolucionario y los combatientes de la clandestinidad integrantes del Movimiento 26 de julio, a los cuales atendió en repetidas ocasiones.

Por tales motivos, su casa fue asaltada por los esbirros del Buró de Represiones Anticomunistas (BRAC), en 1957, y en 1958 fue preso y recluido en el Príncipe y puesto a disposición del Tribunal de Urgencias. En ese año, fue nuevamente detenido y llevado a las oficinas del Servicio de Inteligencia Militar (SIM), donde fue fichado por comunista.

Desde 1959, se integró totalmente al trabajo de la Revolución en una nueva etapa que el propio Profesor Ilizástigui describiera brillantemente: “La alborada socialista tuvo su primicia con la toma del poder revolucionario el 1ro. de enero de 1959. Con la liberación del país comenzaron las grandes medidas transformadoras económico-sociales en la nación. Los obstáculos no se hicieron esperar. La mano opresora del imperialismo, consciente de que se trataba de una auténtica revolución lo que acontecía en Cuba y no de una revuelta popular, en su afán histórico-patológico de mantener atado y esclavizado al pueblo cubano a la metrópoli imperial, reinició tempranamente sus agresiones de todo tipo contra la naciente Revolución.”

Desde 1959 a 1961, trabajó como asesor técnico de la Sanidad Militar del Ejército Rebelde participando en la reorganización de los futuros Servicios Médicos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias. Estuvo movilizado por el Ejército o la Defensa Civil en todos los momentos y circunstancias en que la Patria estuvo en peligro, permaneció acuartelado en el Estado Mayor del Ejército durante la invasión mercenaria de Playa Girón y, durante la Crisis de Octubre, participó movilizado como médico en un hospital militar de campaña en la antigua provincia de Oriente. Fue miembro del Comité Ejecutivo del Colegio Médico Nacional desde 1960 hasta su disolución, manteniendo sus altas posiciones revolucionarias en las enconadas luchas que allí se desarrollaban.

Después de la disolución de los partidos políticos, ingresa en las Organizaciones Revolucionarias Integradas (ORI), donde fue Secretario de Educación del núcleo del Hospital Calixto García hasta crearse el Partido Unido de la Revolución Socialista (PURS), donde desempeña igual responsabilidad, y tiene posteriormente el alto honor de ser Fundador del Partido Comunista de Cuba dentro de la Universidad de La Habana y su Facultad de Medicina.

Es imposible hablar de la vida del Profesor Fidel Ilizástigui Dupuy sin referirnos a su querido Hospital Universitario Calixto García, al cual estuvo ligado hasta el último momento de su vida. De igual forma, nos atrevemos a afirmar que no podrá hacerse ninguna referencia completa de la labor de esta insigne Institución y su docencia sin recordarlo. Aquí inició su carrera hospitalaria como alumno interno por concurso, al ser el tercer expediente de los cursos de 1949 a 1951, y posteriormente Médico Interno de 1951- 1953; obtuvo la plaza de Residente de Medicina por concurso de oposición del propio hospital de 1954 a 1959.
Durante esa época, fue también de forma simultánea Médico Interno del Centro Benéfico Jurídico de los Trabajadores de Cuba, donde se vincula a lo más avanzado del pensamiento obrero de la época y de cuyo trabajo guardó gratos recuerdos, expresados en sus palabras de agradecimiento: “… como olvidar al Dr. Jesús Díaz Soto, comunista, médico internacionalista, director de la Clínica Centro Benéfico Jurídico de los Trabajadores de Cuba, quien por vez primera en nuestro país dirigiera científicamente una institución de salud, gran conversador y siempre con el amor de un hermano mayor me penetró en el mundo de la medicina social, de la organización y administración hospitalarias, de las teorías médicas en boga y, sobre todo, de la importancia y valor imprescindible de una buena Historia Clínica científicamente realizada para la atención médica eficiente de la persona enferma”.

En 1956, fue Jefe de Servicio del Pabellón de Veteranos e integró la Junta Superior de Gobierno del Hospital Universitario y Clínico Consultante de la Clínica Universitaria del Estudiante del propio centro de 1954 a 1960. En 1959, fue seleccionado Jefe de Internos por concurso de oposición y se mantuvo en la Junta Superior de Gobierno desempeñándose como Director del Hospital por sustitución reglamentaria durante 1959.

Alcanza el grado de Médico Especialista de Medicina Interna en 1959 y continúa trabajando como Jefe de Sala de la Unidad Docente I y II del Hospital Universitario y Jefe de Servicio de Medicina Interna de 1960 a 1968, simultaneando esta actividad con múltiples labores docentes en la Facultad de Medicina y como asesor en el naciente Ministerio de Salud Pública. En 1967, se le otorga el Segundo Grado en la Especialidad de Medicina Interna.

Pero su trabajo asistencial no quedó limitado al Hospital Calixto García. Durante esta etapa fue asesor del recién creado Ministerio de Salud Pública, para la organización del Hospital Nacional Enrique Cabrera; elaboró el reglamento hospitalario de éste, el cual fuera posteriormente la base del Primer Reglamento de Hospitales del MINSAP. Fue asesor para la organización externa e interna de las unidades de atención médica de las FAR y, fundamentalmente, trabajó en la organización y reglamentación del Hospital Militar Carlos J. Finlay, del Hospital de la Policía y del Hospital Naval.

Contribuyó de forma significativa a la organización de los servicios de Medicina Interna en varias provincias del país, dirigiendo personalmente la organización de éstos en Santiago de Cuba, Holguín, Camagüey, Matanzas y Pinar del Río al crear las “Cátedras Viajeras”, con lo cual se inició la docencia médica en los Hospitales provinciales clínico-quirúrgicos, pediátricos y ginecoobstétricos, núcleo alrededor del cual surgieron posteriormente las Facultades de Medicina de Holguín (1966), Camagüey (1967), Matanzas y Pinar del Río (1968).

Fue Asesor del Ministro de Salud Pública; dirigió en 1965 la comisión que concibió, organizó y reglamentó la Medicina en la Comunidad como una forma superior de Atención Médica Primaria, la cual se implantó en 1966 y estuvo vigente hasta 1983.
A pesar de sus múltiples funciones, siempre se mantuvo vinculado a la labor asistencial en el Hospital Calixto García. Es difícil definir en qué área entre la asistencia, la investigación y la docencia se destacó más el Profesor Ilizástigui. Sería imposible, pues las desarrolló todas admirablemente y con gran dedicación, pero, sin dudas, que la labor pedagógica fue siempre su gran pasión y era tal su maestría que cada frase e intervención suya era una enseñanza para sus interlocutores.

Su carrera docente la inició en la Cátedra de Bacteriología como alumno ayudante, 1945-1946, y pasó con igual categoría a la Cátedra de Patología Médica de 1946-1951. Ya graduado, ocupó la posición de Ayudante de la Cátedra de Clínica en el período de 1952 a 1959, actividad docente no remunerada en aquel entonces, en que las cátedras eran constituidas oficialmente por sólo 3 profesores, a pesar de la gran actividad docente, nivel de preparación científica y responsabilidad en educar que ya descollaban en el Dr. Ilizástigui.

El triunfo revolucionario de 1959, le impone nuevas tareas que realiza junto a su labor docente, diseña el Plan Nacional de Reforma Hospitalaria y Universitaria, donde se daban las bases para iniciar una transformación de la asistencia médica en el país, alcanzando interrelación con la formación universitaria de los médicos, formando parte de la Comisión Técnica de los Hospitales Universitarios (CTHU), trabajando intensamente para lograr la mejor organización de estos centros, pasándolos de la organización por cátedras con sus clínicas a la actual de departamentos con servicios, al inicio mismo del proceso de la Reforma Universitaria.

La dura lucha política de los primeros años de Revolución como dijera el propio Profesor Ilizástigui “…envuelve a la universidad, que constituía un puntual bastión inconmovible de lucha y de vanguardia revolucionaria, llegaron inevitablemente las brisas portadoras de odio y de contrarrevolución social. Las fuerzas reaccionarias, algunos docentes y estudiantes, se complotaron y comenzaron a tomar acciones negativas, antipopulares y antiuniversitarias. La masa estudiantil y los docentes revolucionarios desbarataron esos planes que tenían como objetivo frenar o revertir el proceso revolucionario en la universidad. La respuesta fue, bajo la orientación de la Revolución, el proceso de depuración de los profesores venales en la Universidad y la creación de la Junta Superior de Gobierno. Comenzó desde entonces la nueva universidad, la universidad de la Revolución y del pueblo cubano (…). Así la estampida contrarrevolucionaria de profesores en la universidad deja a la Facultad de Medicina con sólo 16 docentes, que la historia recogerá como héroes, de sus 154 profesores. Como respuesta a esta vil acción, una gran masa de antiguos residentes, ayudantes de la cátedra, instructores y adscriptos, con fe revolucionaria, para salvar el proceso docente-educativo en la Facultad de Medicina y evitar su paralización, se incorporaron a las diferentes cátedras, previo proceso de selección y lograr el mantener la facultad abierta, sin que sus puertas fueran cerradas ni un solo día”.

Entre aquellos jóvenes profesores se encontraba el Dr. Fidel Ilizástigui Dupuy. Ellos aceptaron el poder de la Junta de Gobierno de la Universidad de La Habana el 15 de julio de 1960, y con un acto viril, valiente, de definición de la conducta humana, social y revolucionaria en momentos difíciles de la Universidad continuaron la docencia formando médicos revolucionarios. Es nombrado entonces Profesor Interno de Medicina y, posteriormente, por concurso, en 1962, Profesor de Medicina. En estos años, desempeñó cargos docentes y administrativos que le permitieron iniciar la integración de las estructuras docentes y asistenciales e influir poderosamente en el desarrollo de la Educación Superior.

De 1960 a 1964, fue jefe del Subdepartamento de Medicina Interna de la Escuela de Medicina y en 1965 al constituirse los departamentos independientes por asignaturas fue Jefe del Departamento de Medicina Interna de la Facultad de Medicina y del Hospital Universitario Calixto García hasta 1968. Su extraordinaria capacidad de trabajo determinó que durante el mismo período de tiempo simultaneara el cargo de Secretario de la Escuela de Medicina. De 1969 a 1971, ejerció el cargo de Subdirector Docente de la Escuela de Medicina y de 1971 a 1972 Jefe del Departamento de Pedagogía Médica de la Facultad de Medicina, desarrollando una intensa labor en la preparación pedagógica de los profesores, identificando las tendencias mundiales más avanzadas en ese campo, atemperándolas a nuestra realidad y necesidades, obra que continuaría realizando a través de toda su vida.

Durante este período, elaboró el diseño y ejecución de un plan de estudios de Medicina, basado en una organización diferente a la tradicional que recibió el nombre de Plan Integrado y que se implantó en la Facultad de Medicina de La Universidad de La Habana en 1970 y en 1974 se extendió a todo el país. En 1973, pasa a Segundo Vicerrector de la Universidad de La Habana y en 1974 al crearse la Vicerrectoría para la Educación Postgraduada y las Relaciones Internacionales, pasa a ocupar este cargo, siendo la primera vez que se desarrollaban estas actividades de forma centralizada, creando el marco funcional de trabajo de esta esfera que en los momentos actuales nos son tan comunes e inherentes a la dirección universitaria.

En ese año 1974, estudió y propuso sustituir la categoría de Profesor Emeritus por la de Profesor de Mérito, elaborando las bases de ésta, las que fueron aprobadas en 1976 al constituirse el MES y que se mantienen en la actualidad para toda la Educación Superior.
Como consecuencia del rápido desarrollo de la Educación Superior, se producen en 1976 cambios estructurales, los cuales llevan a la creación del Ministerio de Educación Superior (MES) y el establecimiento de Universidades e Institutos Superiores, controlados administrativamente por los ministerios homólogos. Bajo estas circunstancias, pasa a ser Decano de la Facultad de Medicina Número 1, radicada en su histórico Hospital Universitario Calixto García y perteneciente al recién creado Instituto Superior de Ciencias Médicas de La Habana (ISCM-H), siendo ratificado por el MES como Profesor Titular de Medicina.

En 1977, ocupa el cargo de Vicerrector Docente del ISCM-H, teniendo nuevamente un papel activo en el desarrollo del nuevo programa de estudios de Medicina que se inició en 1978 y en los programas de estudio de las especialidades de Medicina Interna y de Pediatría, siendo miembro del Consejo Técnico Asesor del Ministerio de Educación Superior desde 1979 y Presidente de la Comisión Permanente de Educación de los Profesores de la Salud desde 1980.

La necesidad de continuar perfeccionando los planes de formación, que permitieran graduar a un médico con una formación superior acorde a las ideas de la Revolución tuvieron en él uno de sus mayores defensores, siendo el coordinador y responsable del equipo de extraordinarios profesores que diseñaron junto al Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz el programa de formación del Especialista de Medicina General Integral y desarrollaron la simiente del Médico y Enfermera de la Familia, para lo que pasó a desempeñar, en 1982, las funciones de Vicerrector de Planes Programas y Desarrollo del Instituto Superior de Ciencias Médicas de La Habana, cargo que ocupó hasta su deceso.

Esta labor puede ser catalogada como la gran obra de su vida, a la cual le brindó todo su amor, captó las ideas del Comandante en Jefe y las llevó a vías de hecho, visitando los principales centros de la docencia médica en el mundo, revisando los más avanzados programas docentes para formar uno propio.

El resultado fue la conformación del Nuevo Plan de Estudio que tiene como objetivo principal, el egresar un Médico General Básico, definiendo a éste, sus funciones, tareas y actividades; identificando las necesidades de aprendizaje y las habilidades a desarrollar: reforma el plan de las asignaturas con una mayor vinculación básico–clínica, destacando el aspecto social de la Medicina y la formación del médico como un “Militante de la Salud”, estableciendo al mismo tiempo el programa de la especialidad de Medicina General Integral.

Su contribución en este campo ha pasado a ser reconocido por destacados profesores de nuestra Universidad Médica de La Habana como el Profesor de Mérito Dr. Cs. Francisco Rojas Ochoa, quien afirmó: “… una importante personalidad de la educación médica y la medicina clínica cubana, el Prof. Fidel Ilizástigui Dupuy, el más influyente en este período, es encargado de dirigir la elaboración de un nuevo plan de estudios. Recordando la tesis respecto al papel de la personalidad en la Historia, de que en el momento necesario, cuando han madurado las condiciones para el cambio, surge el líder que conduce estos cambios, en el campo de la educación médica, fue Ilizástigui quien interpretó y plasmó en el nuevo plan las ideas que en lo político venía desarrollando el Comandante Fidel Castro, en lo que a servicios de salud y necesidades de personal médico, en número y calidad se refiere”.

Elemento que también ha sido reconocido en el desarrollo histórico de la docencia médica en Cuba por el Profesor Gregorio Delgado García, Historiador del MINSAP al destacar que: “…este sistema por asignaturas, que se mantuvo en los planes de 1986 y 1994, todos de 6 años de duración, y bajo la orientación del profesor Ilizástigui puso especial énfasis en la formación del médico que en cada momento necesitaba el Sistema Nacional de Salud Único, para cumplir cabalmente los principios de la salud pública socialista cubana, que son: marcado acento preventivo, de promoción y rehabilitación en las acciones de salud; accesibilidad y gratuidad de dichas acciones; participación del pueblo organizado en su cumplimiento y la solidaridad internacional de nuestra medicina”.

En reconocimiento a su fecunda labor intelectual y sus aportes al desarrollo de la Salud Pública y la pedagogía médica, el Consejo de Estado de la República de Cuba le otorgó por vía directa el grado de Doctor en Ciencias Médicas en 1982. En 1984, integró la comisión del MES para analizar el diseño del Plan de estudio de la especialidad de Farmacia y en 1986 fue Presidente de la Comisión para la elaboración y diseño del Nuevo Programa de Estudio de Licenciatura de Enfermería, iniciado en el Instituto Superior de Ciencias Médicas de La Habana y que nos ha permitido la formación de los cientos de profesionales de esta especialidad con que contamos hoy. En 1987, fue Presidente de la Comisión que elaboró el diseño del Nuevo Plan de Estudios en Estomatología que se mantiene hasta la actualidad. Recibió e impartió más de 100 cursos de postgrado, representando a nuestra Universidad Médica y al país en múltiples eventos internacionales, publicando más de 40 artículos en revistas científicas nacionales e internacionales. Es autor de 17 folletos y coautor de 8 libros de texto.

Es Profesor Consultante desde 1997 y Profesor de Mérito desde 1991. Esta honrosa condición le fue otorgada durante el Acto de Clausura de la Conferencia Integrada Universidad Latinoamericana y Salud de la Población, que auspiciada por la Unión de Universidades de América Latina (UDUAL) y el ISCM-H, sesionó en el Palacio de las Convenciones del 3 al 7 de junio de 1991. En sus palabras de agradecimiento expresó que éste constituía: “…el más preciado galardón, la más alta categoría académica a la que puede soñar docente alguno como reconocimiento a la labor desplegada por mi persona en beneficio de los intereses y objetivos de la Educación Médica Cubana”.  Agradeciendo “…al Partido Comunista de Cuba, cuya ciencia filosófica me ha ayudado durante años para darle una significación humana a mi vida de hombre revolucionario, médico y educador” y un agradecimiento especial “…al Jefe de nuestra Revolución por su ejemplo de firmeza y convicción revolucionarias, por su lucha perenne por el bienestar de las masas, por su valentía política y personal en defensa de la Revolución , por su gran sensibilidad para saber acercarse y entender a los hombres, por su sacrificio y firmeza frente a la adversidad, por haber logrado la primera sociedad socialista en el continente americano, por anteponer la nación a su vida personal, por su afabilidad, bondad y cariño en su trato personal”.

El profesor Fidel Ilizástigui Dupuy fue Fundador y Militante del Partido Comunista de Cuba y ostenta, entre otras, las siguientes condecoraciones y distinciones: Certificado y Botón de Oro de la Asociación Amistad Germano – Soviética, Diploma y Medalla por los 25 años de servicio en el MINSAP, Diploma Por los 270 Años de la Educación Médica Superior, Diploma Por la Dignidad Universitaria, Distinción por la Educación Cubana, Medalla “José Tey”, Medalla “Manuel Fajardo”, Medalla 250 Aniversario de la Universidad de La Habana, Medalla de Combatiente de la Clandestinidad, Medalla 40 Aniversario de las FAR, Medalla XV Aniversario de Servicio en el MININT, Orden “Carlos J. Finlay”, Orden Nacional “Frank País”.

Fidel Enrique Ilizástigui Dupuy falleció el 14 de febrero del 2005 en La Habana a los 81 años de edad.

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