El incremento en la incidencia de embarazos ectópicos en Ciego de Ávila es preocupante, por lo que urge redoblar los esfuerzos en las 19 áreas de salud del territorio, alertó Luis Carmenate Martínez, jefe del Programa Provincial de Obstetricia y Ginecología.
La autoridad sanitaria informó que en 2018, la central provincia registró 232 embarazos ectópicos, mientras que en lo que va de año suman 53, por lo que existe un alarmante aumento del considerado “mayor simulador” en la Ginecobstetricia.
Carmenate Martínez también pidió la colaboración de quienes laboran en hospitales, medios de comunicación, Centro Provincial de Promoción y Educación para la Salud y la Federación de Mujeres Cubanas, entre otros implicados que puedan contribuir a frenar el alza de los casos.
Advirtió que el inicio de las relaciones sexuales a edades cada vez más tempranas, y su tenencia sin el uso del condón, exponen a las mujeres en edad reproductiva a conductas riesgosas para su salud, en la medida en que se contagian por infecciones de trasmisión sexual como la gonorrea y la clamidia, las cuales dañan las trompas y ocasionan la inflamación pélvica.
Otros factores de riesgo que están influyendo son la edad (mayor de 35 años), el hábito de fumar, embarazo ectópico previo, embarazos después de ligaduras de trompas fallidas, la manipulación de los órganos internos de las pacientes por la colocación de dispositivos intrauterinos, cirugías previas de las trompas, procederes intrauterinos como legrados y regulaciones menstruales, precisó.
Carmenate Martínez insistió en que el personal de salud avileño está capacitado para detectar la presencia de un embarazo ectópico y actuar de manera inmediata, pero la labor de educación y promoción de salud siempre será más efectiva.
El embarazo ectópico se produce cuando el óvulo, después de ser fecundado, no se desplaza hasta el útero para su implantación y desarrollo normal, debido a obstrucciones en la trompa, por lo que crece en esa estructura y ocasiona una hemorragia interna, explicó, y alertó que el tratamiento de esta afección es quirúrgico.
Se dice que es un gran simulador porque no siempre se presenta igual, de ahí el alto riesgo de quienes lo padecen; sus síntomas pueden traer confusión y presentarse como un aborto en cualquiera de sus formas, una apendicitis, una infección urinaria o como un proceso inflamatorio pélvico, agregó.
Sin embargo, se puede alertar acerca del dolor en el bajo vientre, sangramiento vaginal en tipo de manchas, trastorno o la falta de menstruación, el desmayo o la pérdida del conocimiento, la marcada palidez y la distensión abdominal, señaló.
El lugar en el que con más frecuencia se implanta el embarazo ectópico, o extrauterino, que por sus raíces griegas significa “fuera de lugar”, es en las trompas de Falopio, pero también —aunque raramente— lo puede hacer en el ovario, en el cuello uterino y en el abdomen, dijo el funcionario del Programa Materno Infantil en el territorio.
Insistió en promover, aún más, entre la población y los profesionales de las áreas de salud, el programa del manejo y control del riesgo genético preconcepcional, garantía para la reproducción a partir de la planificación del embarazo y vía para asegurarse de existencia o no de factores de variada naturaleza que implican un peligro potencial para la descendencia.