Investigadores del Hospital Universitario de Zúrich, adscrito a la Universidad de igual nombre en Suiza, de la Universidad Autónoma de Barcelona, España, del Instituto de Estudios Moleculares de Estados Unidos y otras instituciones, hallaron un vínculo entre la flora intestinal y la aparición de la esclerosis múltiple, enfermedad autoinmune más frecuente en el sexo femenino y cuya edad de aparición suele estar en el intervalo de los 20 a los 40 años. Según la información difundida por los expertos implicados en el estudio, al parecer algunas bacterias presentes en la microbiota de ese órgano son las responsables de dañar a las células del sistema inmunitario y propiciar el desencadenamiento de la misma. Dicho aporte propiciaría el diseño de futuras terapias más efectivas contra esa dolencia degenerativa, que en determinado porcentaje de los pacientes afectados puede provocar invalidez total o incluso la muerte. Ver noticia.