Que los niños tengan un excelente desempeño escolar es la ilusión de todos los padres. Sin embargo, esta se puede ver opacada por problemas de visuales y auditivos, que afectan su desarrollo educativo, su comunicación, su salud y su rendimiento académico, sobre todo en los primeros cinco años de vida.
Según la OMS (Organización Mundial de la Salud), aproximadamente de uno a cinco de cada 1000 bebés nacen con cierto grado de pérdida auditiva o defecto en la audición. De allí, la importancia de hacer un chequeo a los niños que se encuentran en edad escolar.
El objetivo de los exámenes de ojos y oídos para niños entre 5 y 18 años es identificar cuáles son los jóvenes más propensos a presentar una discapacidad auditiva o visual, en pro de prevenir que esto interfiera en sus proceso de aprendizaje.
Sugerencias para detectar las falencias
Los niños que presentan algún tipo de afección en sus ojos u oídos tienden a hablar poco, parpadear demasiado, distraerse con facilidad, subir el volumen del televisor, acercarse demasiado a lo que leen, aumentar el volumen de sus respuestas en una conversación, estar aislados, cansados, estresados o tener problemas para integrarse a un grupo.
Si has notado alguno o varios de estos síntomas en tu hijo, acude de inmediato a una consulta médica especializada. Recuerda que actuar a tiempo puede prevenir mayores afecciones en su salud.
Tomado de Cromos.