Mercurio

CENTRO NACIONAL DE TOXICOLOGÍA

Ave. 31 y calle 114, Marianao. La Habana. Cuba

Correo electrónico: cenatox@infomed.sld.cu

 

METALES CODIGO: M 005

Versión: 01

 Fecha:16/07/2023

Nombre genérico: Mercurio
CUADRO CLÍNICO:

 HG ELEMENTAL O METÁLICO:

  • Efectos agudos:

No es peligrosa la ingestión en pequeñas cantidades (Ej: termómetro) pues apenas se absorbe (0,01%), sin embargo la ingesta masiva produce un claro aumento de los valores plasmáticos de Hg pudiendo ocasionar toxicidad sistémica. Afecta entonces al Sistema Nervioso Central. Se pueden producir intoxicaciones agudas por inhalación de Hg metálico en cuyo caso los síntomas iniciales son respiratorios con disnea, tos seca, fiebre y escalofríos. El cuadro puede evolucionar hacia una neumonitis intersticial con atelectasias y enfisema y a un Síndrome de Distrés Respiratorio Agudo. Se acompaña de síntomas digestivos inespecíficos con nauseas, vómitos y diarrea, sabor metálico, sialorrea y disfagia. Puede haber alteraciones visuales. A continuación pueden aparecer síntomas neurológicos, como temblor distal y facial, junto a una insuficiencia renal y gingivoestomatitis como expresión de la conversión tisular a ión mercúrico. Las inyecciones intravasculares producen granulomas pulmonares pero baja toxicidad sistémica aguda.

  • Efectos crónicos:

Acrodinia (enfermedad rosada), Síndrome nefrótico, Triada clásica (gingivitis, salivación, estomatitis), Tremor, Cambios psicológicos, Eretismo (insomnio, pérdida del apetito, timidez, labilidad emocional, amnesia), Temblor de intensión abolido por el sueño, Neuropatía sensitivo-motora ligera, Fibrosis pulmonar.

HG INORGÁNICOS:

  • Efectos agudos:

El Hg inorgánico, sobre todo en sus formas mercúricas, causa por vía oral un cuadro de causticación con necrosis de la mucosa oral, esófago y estómago, Quemazón en la boca,  Náuseas y vómitos, Gingivitis seria, Estomatitis, Erosiones esofágicas, Dolor abdominal, Debilidad, fatiga, Palidez cutáneo mucosa, Hematemesis, con gastroenteritis hemorrágica y masiva pérdida de líquidos, Shock, Colapso cardiovascular que puede producir la muerte por shock hipovolémico. En su fase de eliminación produce una afectación renal que puede llegar a la insuficiencia renal aguda, por necrosis tubular, y dejar como secuela una insuficiencia renal crónica.La intoxicación subaguda o crónica, algo más frecuente, afecta en todos los casos sobre todo al sistema nervioso central.

  • Efectos crónicos:

El cuadro clínico, que aparece a lo largo de semanas, meses o años, se caracteriza por un temblor involuntario de extremidades y lengua que aumenta con los movimientos voluntarios y desaparece durante el sueño. Se acompaña de alteraciones de conducta y estado de ánimo (ansiedad, irritabilidad, depresión) que se han descrito como una mezcla de neurastenia y eretismo, y de alteraciones mucosas (estomatitis y gingivitis con pérdida de piezas dentarias). Otros síntomas neurológicos son una polineuropatía mixta sensitivomotora, anosmia, constricción del campo visual y ataxia. La intoxicación crónica termina cursando con alteraciones renales que van desde la proteinuria al síndrome nefrótico. En resumen la intoxicación crónica se caracteriza por Dermatitis, gingivitis, estomatitis, tremor, Síntomas neuropsiquiátricos de eretismo, Disfunción renal (proteinuria, Síndrome nefrótico), Enfermedad rosada (alteraciones dermatológicas, cardiovasculares, neuroconductuales) y Banda anterior carmelita en los lentes (Mercurialentitis) por depósito de Hg.

HG ORGÁNICOS:

  • Son más tóxicos los compuestos orgánicos por su mayor capacidad de penetración en el Sistema Nervioso Central.
  •  Aril mercuriales: cuadro clínico similar a la forma inorgánica de Hg.
  • Alquil mercuriales (Metil Hg y Dimetil Hg) se caracteriza por manifestaciones neurológicas como Neuroencefalopatía tóxica, Neuropatía sensorial con parestesias distales, Triada clásica (ataxia, disartria, estrechamiento del campo visual), Batiestesia, Espasticidad, Defectos de audición, Tremor de intención, Labilidad emocional, Pérdida de la concentración, Hiperreflexia, Salivación, Demencia, puede semejar una ELA (Esclerosis Lateral Amiotrófica) y otras manifestaciones como Dermatitis, Alteraciones electrocardiográficas (cambios del ST), Disfunción tubular renal y Trastornos respiratorios.
  • Los derivados mercuriales alquilo como el metilmercurio son potentes neurotóxicos centrales. Producen una encefalopatía grave que se desarrolla a lo largo de semanas o meses y comienza con parestesias periorales y distales, ataxia intensa que termina en parálisis, ceguera, sordera, coma y muerte. Los niños afectados intraútero presentan un cuadro análogo a una parálisis cerebral grave, con un grave retraso del desarrollo, ceguera, sordera y espasticidad.
  • La acrodinia es un cuadro cutáneo descrito en niños tratados con productos de aplicación tópica que contienen mercurio inorgánico. Se trata de una induración hiperqueratósica de la cara, palmas de las manos y plantas de los pies,  acompañada de un rash rosáceo. Se atribuye a una hipersensibilidad idiosincrásica.
TRATAMIENTO:

I.    Soporte de las funciones vitales

II.    Eliminación del tóxico en la puerta de entrada:

– Contacto cutáneo: Se debe quitar la ropa contaminada y lavar con abundante agua y jabón por 15 min como mínimo.

–  Inhalación: se debe trasladar al paciente del área y garantizar ventilación adecuada.

–  La ingestión del mercurio elemental (de un termómetro) no requiere tratamiento. Sólo en casos excepcionales de ingestión de dosis masivas deberá procederse a la evacuación digestiva gástrica e intestinal (Lavado intestinal total) mediante administración de Polietilenglicol (PEG). En los derivados orgánicos o inorgánicos indica un lavado gástrico, en el segundo caso precedido de una endoscopia por su capacidad cáustica. No suele ser necesario en la ingestión de disoluciones antisépticas, de tipo mercurocromo, solo en volúmenes mayores de 20 ml. El carbón activado interrumpe la absorción de mercurio inorgánico por lo que debería darse en las dosis habituales.

   III.    Eliminación de la sustancia tóxica absorbida: no procede.

  IV.    Antidototerapia:

– El tratamiento de la intoxicación crónica mercurial no es nada fácil ya que la acción de los quelantes no es tan eficaz como en las producidas en otros metales pesados. Los antídotos son efectivos sólo en las intoxicaciones por mercuriales inorgánicos, el tratamiento de las intoxicaciones por mercurio orgánico y por mercurio elemental debe ser simplemente sintomático.

– En la intoxicación aguda por compuestos inorgánicos el antídoto más adecuado es el Dimercaprol o BAL, por vía IM, a dosis de 3 – 4  mg/Kg c/4h las primeras 48 h,  c/6h las siguientes 24 – 48h y  c/12h durante 6 días más, a completar 10 días de tratamiento. Ajustar dosis en las Infecciones Respiratorias Agudas. El BAL no actúa frente a los organomercuriales, pero debería administrarse en las ingestiones agudas de los compuestos de mercurio arílicos (Ej. Acetato fenilmercúrico que en el organismo se convierte en mercurio inorgánico)

Succimer o Acido 2,3 Dimercaptosuccínico (DMSA) Presentación tab 10 mg. Dosis: 10 mg/Kg/dosis cada 8 horas por 5 días.

-La D penicilamina no es recomendable dada la intolerancia digestiva que suelen presentar estos pacientes. Es útil en exposiciones a mercurio elemental e inorgánico menos sintomáticas.

   V.    Tratamiento sintomático y de las complicaciones

– Especial atención a la protección gastroesofágica fundamentalmente en los compuestos inorgánicos del Hg por su efecto cáustico.

– La inhalación de altas dosis de vapor de mercurio, en medio laboral, requiere tratamiento sintomático de soporte respiratorio.

 
INFORMACIÓN ADICIONAL

– El mercurio no es un elemento esencial para el ser humano. Es un tóxico acumulativo. “No desempeña función fisiológica alguna en el organismo”. Es un miembro del grupo II de los elementos metálicos con un Pm de 200,6. Su símbolo químico procede del latín hydrargyros que significa plata líquida, lo que indica su aspecto. Es el único elemento metálico líquido y algo volátil a temperatura ambiente.

Las principales fuentes de contaminantes mercuriales han sido la actividad minera, residuos industriales de plantas cloroalcali o de fabricación de vinilo y fungicidas, pinturas antifúngicas, fotografía, pirotecnia, baterías secas y pilas, industrias papeleras y laboratorios médico-veterinarios y dentales. Se consideran niveles normales de Hg en sangre los inferiores a 10 mcg/l y en orina de 20 mcg/l.

  •  Se encuentra en tres formas primarias:

– Hg elemental o metálico en estado de valencia 0 (Azogue).

Compuestos inorgánicos mercurosos (1+) y mercúricos (2+)

Compuestos orgánicos va unido a cadenas de carbono de longitud mayor (Alquil o Aril)  o menor (etil o metil).

MECANISMO DE ACCION

La toxicidad del Hg está determinada por su gran afinidad por los grupos SH- en que reemplaza al hidrógeno. También es capaz de reaccionar con grupos amida, carboxilo y fosforilo. Esto produce graves alteraciones en proteínas con actividad enzimática, con funciones de transporte y estructurales que se expresan en diferentes tejidos. Disminuye la conducción del potencial eléctrico, inhibe a la Na-K-ATPasa, hemoliza a los eritrocitos.

 Bibliografía:

 Dueñas Laíta A. Intoxicaciones agudas en Medicina de Urgencia y Cuidados Críticos. Barcelona: Ed. Masson; 2002. p. 299

Ellenhorn MJ, Barceloux DG. Medical Toxicology. Diagnosis and treatment of human poisoning. Amsterdam: Ed. Elsevier; 1988. p.1048-53