30 de septiembre: Día Internacional de la Traducción

not-11El Día Internacional de la Traducción (DIT), una jornada dedicada a reconocer el valioso trabajo que hacen los traductores, se celebra desde 1991 por iniciativa de la Federación Internacional de Traductores (FIT). Este organismo agrupa a 100 asociaciones que representan a más de 80.000 traductores de 55 países y tiene la misión de promover la profesionalidad y mejorar las condiciones de trabajo de las personas que se dedican a la traducción.

Cada año la FIT elige un lema y un cartel para conmemorar el DIT  e invita a todos los que lo deseen a celebrar esta jornada mediante todo tipo de actividades.

El lema del 2016 es “Translation and Interpreting: Connecting Worlds” (en español  “Traducción e interpretación: conectando mundos”).

Este lema quiere destacar el papel de los traductores a la hora de facilitar la comunicación entre las personas en un mundo cada vez más globalizado, por ejemplo en ámbitos como la ciencia, la medicina, los negocios, el derecho o la tecnología. A partir de este mensaje, se organizan una gran cantidad de actividades en todo el mundo, siempre relacionadas con la traducción.

Para celebrar este día, la FIT eligió el 30 de septiembre, que no por casualidad es el día de San Jerónimo de Estridón, considerado el patrón de los traductores.

Jerónimo de Estridón fue un estudioso que vivió en la Roma del siglo V y dedicó gran parte de su vida a traducir la Biblia del griego y el hebreo al latín. Esto permitió que los romanos pudieran entender las Sagradas Escrituras, porque San Jerónimo las tradujo a la lengua “vulgar”, es decir, el latín que hablaba la gente. Por eso su traducción de la Biblia se conoce como la “Vulgata” y ha sido el texto oficial de la iglesia católica hasta 1979, cuando se aprobó una nueva versión revisada. ¡Eso sí que es un trabajo que deja huella! Aparte de su tarea como traductor, Jerónimo de Estridón se hizo famoso por huir del lujo de la iglesia de Roma y pasarse los últimos 35 años de su vida en una cueva de Belén, cerca de donde nació Jesús. Murió el 30 de septiembre del año 420, a los 80 años, una edad muy avanzada para la época.

Actualización

25 de Noviembre 2017